6 alternativas a la sal para comer sano (y sabroso)
Como muchos sabemos, la sal puede generarnos numerosos problemas de salud, desde hipertensión, hasta retención de líquidos. Sin embargo, y aunque estos se puedan solucionar cuando aparezcan, es mejor adherirnos al dicho que dicta “más vale prevenir que curar”.
Puede resultar complicado librarnos de ese ingrediente que está presente en todos nuestros platos, ya que con él podemos darle alegría a cualquiera de nuestros platos.
Sin embargo, una vez nos colocamos en la tesitura de renunciar a la sal para mantener una dieta más saludable, debemos conocer aquellas alternativas que darán sabor a nuestros platos.
Una de ellas, son las especias, que aderezan y dan sabor –incluso más que la sal- y pueden ser empleadas en todo tipo de platos gracias a la variedad que ofrece el mercado. Una de ellas, la probablemente más famosa, la pimienta negra fresca. Una vez emplees esta sustancia en tus platos te olvidarás de la sal para sazonar tus alimentos. Sin embargo, no debemos olvidarnos del complemento ‘fresca’ pues para que sea 100% saludable debe ser aquella que molemos nosotros en casa, no la que ya viene procesada del supermercado puesto que ésta puede contener conservantes.
Otra especia que podemos emplear es la pimienta cayena. Esta no sólo dará sabor a nuestros platos, sino que puede ayudar a proteger contra enfermedades cardiovasculares ya que limpia las arterias, desintoxica el organismo y contribuye contra los problemas cardiacos. Además, puede resultar un perfecto aliado contra las hemorroides.
No debemos olvidarnos del comino, una especia que se encuentra en la cuenca del Mediterráneo y que además de sazonar nuestros platos y aderezarlos ayudará a combatir el resfriado, evitará el insomnio y facilitará nuestra digestión.
Otro sazonador que puedes emplear para que tus recetas tengan el mayor sabor posible es la mostaza. No debemos olvidarnos que al tratarse de consejos saludables, ésta debe ser en grano. Será un aliado perfecto en carnes blancas y rojas, antes de cocinarlos o una vez los vayamos a servir en la mesa. Esta sustancia puede ayudar a las carnes a marinarse, dándoles un sabor salado mientras mantenemos nuestra dieta saludable.
Las semillas de girasol han de ser otra opción que tengamos en mente para dar sabor a nuestros platos, sobre todo en el caso de las ensaladas. Para que éstas queden perfectas conviene agregar semillas de girasol con unas pocas gotas de limón y aceite de oliva.
Por otro lado, la salsa de soja. Ésta resulta más saludable que la sal ya que contiene menor contenido en sodio y por ello es una alternativa útil para dejar de comer sal. Al igual que la mostaza, la salsa de soja se puede añadir antes de cocinar o una vez el plato ya está servido en función del gusto de cada uno. Además, con añadir una pizca será suficiente para aportar sabor a nuestros platos.
También se puede optar por el zumo de limón, siempre en pocas cantidades puesto que puede generarnos acidez. Sin embargo, si lo empleamos en su justa medida puede dar un sabor diferente a nuestras comidas. En este punto, es necesario recordar que no combina igual con todos los alimentos y hemos de saber cuáles son los idóneos.
Además, podemos recurrir a la cebolla o el ajo en polvo. Dos sustancias que darán sabor a nuestros platos, tanto que debemos emplearlos con cuidado para que no se conviertan en el centro de atención de nuestros platos.
