El aterrizaje de Alfonso Coronel de Palma en la presidencia de la COPE no prevé cambios importantes en la cadena de radio

El nombramiento del nuevo presidente, por la Conferencia Episcopal Española, se produjo –según informaciones recogidas por El Confidencial Digital- a propuesta de los cardenales Rouco Varela y Antonio Cañizares, sin que el presidente de la CEE, Ricardo Blázquez pusiera ninguna pega.   La designación de Coronel de Palma, promovida por tanto por Rouco y Cañizares, dejó fuera otras dos soluciones posibles, éstas de dentro de la casa y enfrentadas. Una, el nombramiento del eurodiputado Luis Herrero, que era la opción que patrocinaba Federico Jiménez Losantos; y la otra la elección del actual consejero delegado, Rafael Pérez del Puerto. Los obispos decidieron no optar por ninguno de los dos “bandos” y buscar una tercera vía.   Aunque la exclusión de Luis Herrero distancia a los obispos de las propuestas de Jiménez Losantos, sin embargo –según los datos recogidos por ECD- el nuevo presidente de COPE no tiene voluntad de prescindir de quien es el principal comunicador de la cadena, ni tampoco los cardenales Rouco y Cañizares están dispuestos a “entregar su cabeza”.   Otra cosa es lo que pueda decidir el propio Jiménez Losantos. Mientras personas del Grupo Intereconomía aseguran que el acuerdo con Julio Ariza ya está hecho, y que el comunicador, que –dicen- ya ha visitado varias veces sus instalaciones, sería nuevo vicepresidente del grupo (se habla incluso de un contrato de 10 millones de euros), la presidencia de la compañía niega por el contrario que exista ese acuerdo. Es más, el propio Julio Ariza lo desmintió personalmente, en fecha reciente, a miembros de la redacción.   La incorporación de Alfonso Coronel de Palma a la presidencia de la COPE no se producirá hasta finales de junio, que es cuando será efectivo el nombramiento. Personas que le conocen afirman que es hombre que “irá muy despacio”. Se descarta que tome ninguna decisión en contra del parecer de los dos cardenales citados, sobre todo de Cañizares, que es quien en estos momentos está más activo en el asunto COPE dentro de la Conferencia Episcopal.   Se piensa que el nuevo presidente no llevará a nadie a la cadena, y que, desde luego, evitará entrar en asuntos espinosos, al menos en este primer momento. Se recuerda que en el CEU estuvo los cinco primeros años observando y estudiando la situación, y solamente en los tres últimos años de su mandato tomó las decisiones más de fondo.