“Dásela al que lleve bandera”. Así fueron los envíos altruistas de pizza a Ferraz
Un grupo de ciudadanos ha pagado el envío de comida destinada a los manifestantes que protestan cada noche ante la sede del PSOE
- De 13 a 27 repartos de pizza en una noche por restaurante
- Movimiento solidario con los manifestantes
Bajo el revuelo político y las manifestaciones en la calle Ferraz en rechazo a la amnistía a políticos catalanes independentistas, se han presenciado escenas singulares que van más allá del discurso político convencional. El pasado martes, una muestra peculiar de apoyo surgió en forma de entregas masivas de comida, desencadenando una ola de solidaridad gastronómica en medio del fervor de la protesta.
Durante la manifestación, varios ciudadanos anónimos decidieron apoyar las protestas de una manera inusual: ordenando pizzas y especificando en los pedidos que se entregaran a "quien lleve bandera". Este gesto de solidaridad peculiar captó la atención tanto de los manifestantes como de loas transeúntes, sorprendiendo incluso a los propios repartidores.
De 13 a 27 repartos de pizza en una noche por restaurante
Una de las pizzerías, que aumentaron el número de servicios a domicilio, confirma a ECD que la semana anterior no habían entregado ningún pedido en esa dirección, y que en esa fecha aumentaron hasta 8 los pedidos en la zona de la sede socialista. Sin embargo, el desafío para los repartidores fue considerable, ya que la presencia policial dificultaba su acceso a la zona de la manifestación, generando cierto caos logístico.
El escenario se volvió aún más complicado cuando el número de pedidos aumentó drásticamente el pasado marte durante las manifestaciones. El reparto de pizzas en los aledaños de la sede socialista supuso un 30% del total de las entregas diarias, un incremento notable que desbordó a los repartidores.
Los obstáculos generados por las restricciones policiales no solo afectaron la rapidez de las entregas, sino que también representaron un desafío adicional para los negocios de entrega a domicilio. Las pizzerías y otros establecimientos se vieron obligados a replantear su logística y estrategias de entrega para poder cumplir con las demandas de sus clientes en medio de un entorno complejo y altamente controlado por las fuerzas de seguridad.
A pesar de estos desafíos, los repartidores de comida a domicilio mostraron resiliencia y determinación para cumplir con sus responsabilidades, encontrando rutas alternativas y estrategias improvisadas para sortear los bloqueos y entregar los pedidos.
Las tensiones entre los manifestantes y la policía, aunque son parte del escenario social, han dejado en evidencia la difícil situación a la que se enfrentan los repartidores de comida a domicilio, quienes se han convertido en actores involuntarios de un escenario de protestas que altera su rutina laboral y logística de manera significativa.
Movimiento solidario con los manifestantes
Lo que comenzó como una iniciativa singular con pizzas se ha transformado en un movimiento más amplio, extendiéndose a la entrega de sándwiches y hamburguesas en días posteriores. La solidaridad a través de la comida se ha convertido en una expresión efectiva de apoyo a las protestas contra la amnistía catalana.
Estos gestos han generado un ambiente peculiar y emotivo en medio de la intensidad política, destacando la creatividad y la diversidad de formas en las que los ciudadanos eligen expresar su descontento y solidaridad.
Más allá de las posturas políticas encontradas en la calle Ferraz, estas anécdotas demuestran la capacidad de la sociedad para encontrar maneras sorprendentes y pacíficas de manifestar su apoyo o desacuerdo, dejando un curioso y sabroso legado en las protestas contra la amnistía a políticos catalanes independentistas.
