Hillary, Bibiana y la salud del planeta
Si Obama y Zapatero estructuran medidas para preservar el planeta del calentamiento global, paradójicamente impulsan normativas contra los habitantes del mismo.
Sus súbditas, Clinton y Aído rivalizan entre ellas en la implantación del aborto. Hillary, promotora del mismo desde Latinoamérica a Afganistán, ha sido galardonada por la internacional abortista IPPF, cuya fundadora, Margaret Sanger, no se avergonzaba en afirmar: “Lo más misericordioso que una familia numerosa puede hacer con uno de sus miembros más pequeños es matarlo”.
La delincuencia legalizada es lo más agresivo para la conciencia de un pueblo, al que se confunde llamando bien al mal y despoja a sus miembros más débiles de una vida a la cual ellos no pidieron ser convocados. La vida se mata porque la vida sólo es don para quienes aman. Y de amor, por lo que se ve, los políticos no andan muy sobrados.
