La mutación genética

Irene Montero señala hacia la bancada de Vox en el Congreso de los Diputados (Foto: Fernando Sánchez / Europa Press).
Irene Montero señala hacia la bancada de Vox en el Congreso de los Diputados (Foto: Fernando Sánchez / Europa Press).

Es de cajón y no puede escapar a una mente normal que nadie, menos aún ministros con y sin pedigrí e independientemente de la ruta que siguieran para alcanzar tal alta magistratura, muestren aparentes signos de cretinismo repentino y agudo que pudieran llevar a la conclusión, creo equivocada, pudieran estar afectados por dicha patología en proceso irreversible.

En este sentido constituyen un misterio las razones que impelen a personajes secundarios y prescindibles en términos políticos a clamorosos excesos verbales acompañados de una imagen corporal agresiva cual es caso de Dña. Irene Montero, máster acreditado en activismo político y ciertamente dotada de una mente preclara de excepcionales facultades intelectuales que, juntamente a su poderoso empuje y juvenil pasión y entrega a causas nobles desde su más tierna juventud, muestra no obstante cierta obsesión en su intento por convertir hechos biológicos en ideología, así como en defensa de los desamparados que sean de su órbita ideológica.

Sus manifiestas y en cascada ocurrencias en estas últimas semanas indican que obedecen a un plan preconcebido por quien o quienes la dirigen como espolón frontal con formas de matonismo "hembrista", algo que también sus adeptos empiezan a percibir como auténticas barbaridades.

La pregunta que ha hacerse es si estará tratando de resucitar al moribundo, yo creo cadáver insepulto y maloliente en que ha devenido la hermandad entre Izquierda Unida y Podemos, más en concreto Podemos, proceso que comenzó a visualizarse con el advenimiento de "Dña. Yolanda Díaz" en sustitución de "D. Pablo Iglesias" en las más altas esferas de la política nacional en jugada propia de un trilerismo seña de identidad del PSOE con el fin de hacerse con los servicios de Dña. Yolanda, de quien es justo reconocer un desarrollado instinto de supervivencia política y personal al intuir, razón no le faltaba, que carecía de futuro personal y político a medio plazo, lo que le hizo plegarse de "sus principios" y actuar, a modo de caballo o mejor por aquello del mal llamado género como "yegua de Troya" para, en términos militares, efectuar maniobras de diversión y entretenimiento con la gente de Podemos.

Con este fin viene mareado la perdiz con la creación del grupo "MAR", plataforma a la que se han incorporado como "primas donnas" la Sra. Oltra, ¿donde está?, la siempre generosa Dña. Ana Colau con intereses claramente coincidentes con los de Dña. Ana Colau, Dña. Mónica García, médica y madre según sus apologistas y Dña. Fátima Hamed que le proporciona un toque racial-cultural-nacional más vistoso.

El encargo del "Doctor Jefe" a la hoy Vice y anteriormente ministra de Trabajo y artífice de un milagro similar a la multiplicación de los panes y los peces, prodigio sin precedentes al convertir parados "que no trabajan" en fijos discontinuos "que tampoco trabajan" que le reportará como especial gracia o remuneración, acuérdense de Carrillo, su futura y plena integración en la "Casa-Palacio Común del PSOE", hoy secta que se percibe por la entrega y adoración sin límites a un caudillo cuyas "actuaciones" hacen bueno el adagio turco según el cual, "que un payaso viva en un palacio no le convierte en rey, pero hace del palacio un circo".

La jugada pilló con el pie cambiado a Don Pablo, que contribuyó de forma activa al ascenso de Dña. Yolanda propiciado y exigido por él mismo y razones, "posiblemente traspapeladas en algún juzgado" quién a última hora, quien lo diría, se sintió engañado y utilizado "otro más" por el caudillo en vodevil, tango incluido y conocido como el "lamento del cornudo" con un D. Pablo acornado "políticamente" que entendió, a última también, que su pacto no estaba realmente "garantizado" por Dña. Yolanda, la misma a su vez controlada o así lo creía por Dña. Irene, su pareja, también por él mismo elevada a la dignidad ministerial. !!Pobrecito!!, al comprender finalmente había sido ÉL el torero toreado ,insisto de nuevo "políticamente".

La acción de gobierno (un decir) del héroe cogido por el ronzal y manejado por los antisistema en tal tragicomedia, de seguro ha tenido que ser y aún lo seguirá siendo un suplicio para su "en apariencia" narcisa personalidad al tener que soportar a diario las tarascadas de Podemos. También especial suplicio "al considerarlos patriotas imprescindibles" que garantizan su estancia en el "Palacio-Circo" es el apoyo de bandas formadas por nacionalistas pedigüeños de la calaña del PNV, de los descendientes "políticos" de ETA y de golpistas cuyos gravísimos delitos fueron clasificados por el Tribunal Supremo con benevolencia franciscana como "sedicion", delito cuya posterior y en la práctica supresión "que no reforma" conlleva una rebaja temeraria y bochornosa de las penas, dando paso en muy corto plazo al de "malversación ", de aplicación muy especial a quienes meten mano a los dineros de nuestros impuestos destinados a fines del Estado.

Lo anterior lleva al pronóstico de la casi segura demolición controlada y visible de un sistema a priori basado en el Estado de Derecho por aniquilación, a todas luces imparable de las Instituciones que debieran sustentar a una enferma Constitución, pero en la que pasado el tiempo empieza a evidenciarse que la mayoría de los llamados padres que la engendraron fueron simples "tácticos" en un intento fácil de contentar de inmediato a "casi todos", lo que otros, con pretensiones "estratégicas" aprovecharon para incubar en la misma y con diabólica intención una "mutación que conduciría inexorablemente a la modificación genética de un monstruo que a la postre produciría la fragmentación de España".

 

Y en efecto, pasados algunos años se ha producido la eclosión retardada, asomando la cara de la bestia que anidaba en el seno de la Constitución como "nacionalidades" que anulan y destruye la única, la "auténtica nación" construida y macerada a lo largo de siglos de cultura, historia, idioma, religión, sufrimiento y sangre.

Junto a lo anterior y situados el contexto de un "globalismo" que tiene como objetivo inmediato la disolución de los Estados y sus configuraciones aceptadas durante siglos, en el caso de España lo ha encargado al caudillo o sátrapa más conveniente por no tener más objetivo "aparente" que la representación y la impostura propia de un narciso ávido de reconocimiento que contempla a sus gobernados cuan diminutos enanos que, en su conjunto, forman un enorme monumento a la ingratitud sin atisbo de reconocimiento a quien como Estadista, vela por el bienestar de los mismos.

En llegando a este punto y con los magros conocimientos adquiridos en grado "no culminado" de Psicología, entiendo que solo disponemos como herramienta de medida moral y psicológica de un individuo "su comportamiento" y variables, se supone desconocidas, que pueden proporcionar un perfil incorrecto de la personalidad del individuo. No obstante y dado es el comportamiento de este caudillo cuanto tenemos, realizando con éxito la función encomendada de dar continuidad a la situación de desgobierno actual y la colaboración de una tropa entregada y formada por personajes secundarios, no otra cosa que síndromes de una gravísima enfermedad oculta en el celofán de la propaganda estéril se confirma, al decir de un muy ilustrado amigo "están todos faltos de hambre" al serles necesario pasar por necesidades que les haga valorar lo que se les regala por su condición de narcisos convencidos que solo por haber nacido lo merecen todo.

Es por ello el relato de anécdotas y necedades como son convertir parados "que no trabajan en fijos discontinuos que "tampoco", o las de una ministra obsesionada por la maldad intrínseca de los varones y encantada de sus ocurrencias, ello sin caer en la cuenta podrá ser si no lo es ya un juguete roto como otras y otros prefabricado por el Sistema que les mantendrá solamente mientras entienda les son útiles 

Y al frente de esta tropa un presidente del gobierno, "sátrapa delegado" por el sistema globalista hoy imperante del que, en mi opinión, es tiempo perdido calificar con epítetos, entiéndase "referidos a su comportamiento" que no a la esencia misma de su persona o psiquis. Solamente la percepción de su comportamiento, insisto en esto, que nos pudiera llevar a conclusiones equívocas al considerarlo narciso, ególatra, sociópata, inculto y amoral por entre otras razones y valga solo como ejemplo presumir, válgame Dios, "que pasará a la historia" como desenterrador de la momia del General Franco. 

Ante tales manifestaciones y comportamiento, concluyo es mi opinión estamos ante un personaje en su deriva mental convencido de su trascendencia y de ser todo un estadista, cuando realmente y por razones externas ya explicadas, pudiera tratarse de un aventurero irresponsable que deja en manos de rufianes, golpistas, antisistema y otros profesionales especialistas en la difusión del odio, el albur de un futuro muy cierto y desdichado. Un sujeto al que pudiera ser atribuible, quiera Dios que no, una enfermiza obsesión de permanencia en el poder a toda costa y con empleo de la herramienta diabólica del odio contra el otro porque que piensa distinto, paso previo para que también le pudiéramos odiar a él por ello.

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