Así se gestó el ‘no’ de Antonio Fernández-Galiano a Vocento. Borja Prado (Endesa), pieza clave para atar su continuidad en Unidad Editorial

Ha sido el ‘culebrón’ del verano. Vocento ha estado dos semanas sin consejero delegado esperando a que Antonio Fernández-Galiano se decidiera. Al principio dijo ‘sí’, pero los socios italianos de Unidad Editorial han conseguido retenerlo. Así ha ocurrido todo.

El lunes 4 de julio, José Manuel Vargas y el consejo de administración de Vocento acuerdan el cese del consejero delegado. Sin tiempo que perder, el grupo editor de ABC le hace una oferta a Antonio Fernández-Galiano para ocupar el puesto. Su nombre ya había salido en algunas reuniones y en Vocento lo consideran como la persona idónea.

Tal y como contó ECD el mismo día 6, en Vocento daban por hecha su incorporación. En ese momento, Galiano contaba con llevarse al grupo de la competencia a dos de sus principales directivos en Unidad Editorial: Luis Enríquez, director general del grupo, y Alejandro de Vicente, director general de publicidad –ver noticia-.

El fin de semana, Galiano estuvo en Milán, donde explicó que tenía una importante oferta de Vocento y que pensaba abandonar el grupo. Regreso el lunes y comunicó a los máximos directivos de Unidad Editorial que daba marcha atrás: los directivos de RCS MediaGroup le habían convencido de que tenía que continuar: “Me quedo”, le dijo a algunos nada más llegar a Madrid –léalo aquí-.

La historia volvió a dar un giro de 180 grados la semana pasada y Galiano comentó que sí se marchaba. El consejo de administración de Vocento se preparó para su llegada y se convocó una reunión para el mismo viernes para anunciar su fichaje. Estaba a punto de firmar. Se convertiría en el consejero delegado y, a principios de 2012, asumiría la presidencia ejecutiva –consulte aquí todos los detalles-.

Pero todo se truncó la noche del jueves. Fue una velada de lo más rocambolesca para los directivos de Vocento, que se encontraban presentando ‘Kiosko y más’ junto a la cúpula de El País y del resto de grupo editores que participan en el proyecto.

En un momento determinado del acto, llegó al Palacio de Telecomunicaciones de Madrid la información de que Galiano volvía a dar marcha atrás: no ficharía al día siguiente por Vocento. A algunos, aseguran las fuentes consultadas por El Confidencial Digital, se les amargó la noche. El protagonista tenía prevista una reunión con Diego del Alcázar, presidente del grupo, que suspendió que manera unilateral.

¿Por qué Galiano dio marcha atrás en el último instante? Unas horas antes, estuvo en Italia. Allí le insistieron por segunda vez de que debía continuar en el proyecto de Unidad Editorial, de que le necesitaban. Y, efectivamente, lograron convencerle.

Las fuentes consultadas por ECD apuntan que un hombre ha sido clave para que Antonio Fernández-Galiano continúe junto a Pedro J. Ramírez. Se trata de Borja Prado, presidente de Endesa y máximo representante en España de Mediobanca, uno de los socios principales de RCS MediaGroup. Prado, a su vez, mantienen una excelente relación con los directivos de Unidad Editorial.

Plantón a Vocento

 

El consejo de Vocento se encontró el mismo jueves con el ‘no’ de Galiano y se vio obligado a desconvocar la reunión del día siguiente. El viernes se celebró un consejo extraordinario que únicamente duró 10 minutos porque el único punto del día (la contratación del nuevo consejero delegado) se había trastocado justo el día anterior.

En Vocento se comenta que Fernández-Galiano ha protagonizado con ellos la misma historia que con Prisa. Hace unos meses, Juan Luis Cebrián le hace una oferta, que en principio acepta. Una semana después la rechazó.

Tras el fichaje frustrado, el objetivo de Vocento se centró entonces en cerrar la incorporación de Luis Enríquez, director general de negocio de Unidad Editorial. Era viernes y había que darse prisa. Su nombramiento como nuevo CEO de Vocento se comunicó ayer lunes.

Hay que recordar que el propio Enríquez mantuvo algo más de un año un pulso interno con Alejandro de Vicente, responsable de publicidad de Unidad Editorial y que estuvo a punto de marcharse a Vocento con Galiano. Enríquez propuso la división del área comercial que controla De Vicente, pero éste se plantó: si aprobaban ese plan, dimitía.

Enríquez era un profesional muy valorado en Unidad Editorial. Algunos directivos le situaban como el ‘delfín’ del propio Galiano, el máximo candidato a sucederle algún día. Un hombre de futuro: “Se nos va el gestor que nos podía salvar”, explicaba ayer un alto cargo del grupo a El Confidencial Digital.

Luis Enríquez estará al frente de todos los negocios de Vocento: su labor se centrará principalmente en la prensa y en Internet. En las cabeceras regionales, Iñaki Arechavaleta se encargará de apoyar su gestión-

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