El Grupo La Sexta, Mediapro y Público no existe: José Miguel Contreras y Jaume Roures no sintonizan; sólo hay ‘química’ para poner en valor sus negocios

¿Si la Cadena SER está en venta, podría imaginarse un emporio integrado por La Sexta, Mediapro, Público y la emisora del Grupo Prisa? No lo parece. El argumento es el siguiente: no existe ‘feeling’ personal entre José Miguel Contreras y Jaume Roures.

El Confidencial Digital ha podido recoger el testimonio personal de directivos que conocen bien a los dos directivos. Preguntados sobre esta situación, coinciden en sus análisis: no hay sintonía entre Contreras y Roures; se trata de una alianza de dos personas “condenadas a entenderse” a la hora de poner en valor sus negocios… y poco más.

Quienes les conocen bien y tratan regularmente con ellos insisten: “no hay química personal y si constituyen una sociedad bien avenida es por puro interés comercial”. Por cierto, que ninguno de los dos tiene ahora un interés especial por ocultar que las cosas son realmente así. Es lo que sostienen quienes los escuchan con frecuencia.

“Ambos tienen estilos diferentes y líneas de actuación también separadas y muy definidas”, concreta alguien que los tratan a menudo. “Contreras tiene la televisión, La Sexta, y Globomedia; Roures se ocupa del cine y de los derechos deportivos. Ninguno interfiere en el área del otro –también porque no dominan esos campos-, ambos han montado sus equipos a su imagen y semejanza y están razonablemente satisfechos: ¡les va bien así!”, remata este conocedor.

Por lo tanto, parece descartarse que la coalición Roures-Contreras pueda derivar en un ‘Grupo’ al estilo Vocento, Prisa o Unidad Editorial.

La confirmación de esto último es quizás lo sucedido con el diario Público. Se trata de un proyecto impulsado en primera persona por el presidente de Mediapro y su socio, Tatxo Benet. José Miguel Contreras y los accionistas de La Sexta fueron consultados, una y otra vez, sobre su posible implicación en el nacimiento del periódico.

Pero Contreras jamás vio un negocio en este proyecto, se mostró reticente y nunca dio su brazo a torcer. La crisis de la prensa escrita parecía vislumbrarse en el horizonte y manifestó su deseo de quedar al margen. Esa decisión no gustó nada a Roures, que se vio obligado a buscar otros accionistas para cubrir el capital inicial necesario para el proyecto.

Parte de ese dinero procede, por cierto, de los bolsillos de Roures y Benet, ni siquiera de sus sociedades. Y la aventura de Público todavía es gravemente deficitaria. De ahí que la ‘espantada’ de Contreras sea una pequeña espina clavada en la memoria de Roures.

 

Video del día

Feijóo asegura que PSC, Junts y ERC son “el tripartido
de facto que gobierna en Cataluña”
Comentarios