Los autónomos eligen el renting

El vehículo por excelencia del autónomo es la furgoneta. La emplean los que se dedican a lo que conocemos como oficios, los repartidores o cualquier profesional que tenga que trasladar objetos, materiales, etc. De este modo, lo primero que hace un autónomo es comprarse uno de estos vehículos, aunque ahora tienen opciones mucho más interesantes como son las furgonetas de Renting.

¿Por qué los autónomos se decantan por el renting en lugar de por la compra?

La razón es que el renting da a estos trabajadores una serie de ventajas sobre la compra. Son tantas que esta opción se elige cada vez más, y de hecho en algunos sectores como el del reparto ya ni siquiera se plantean realizar una compra tradicional.

Hay varios beneficios fiscales

Gracias al renting, los autónomos se deducen el 100 % de la cuota en el IRPF y el 50 % del IVA como mínimo. Esta cantidad llega a ser del 100 % si el profesional puede demostrar que el vehículo solo se emplea para actividades relacionadas con el trabajo.

Es sencillo en el caso de las furgonetas. Suelen ir rotuladas, llevan pocos asientos y algunas vienen con caja abierta. Eso hace fácil demostrar que no se usan a nivel particular.

Siempre conducen furgonetas nuevas

Uno de los problemas de la compra es que las furgonetas van envejeciendo, y cuando lo hacen el autónomo no siempre tiene disponible el dinero necesario para adquirir una.

Se trata de otro de los beneficios que les aporta el renting, ya que los vehículos se renuevan en un periodo que suele ir de los dos a los cuatro años, dependiendo del acuerdo al que se haya llegado. Así, cuando el contrato se termina se puede firmar otro, o dicho de otra manera, se estrena una furgoneta.

Es más fácil acceder a una furgoneta eléctrica

Este año es la fecha límite para que todas las ciudades de más de 50 000 habitantes tengan zonas de bajas emisiones. Así, los vehículos sin etiqueta no pueden pasar por esos lugares.

Las condiciones se van a ir endureciendo y una solución para los autónomos es el renting de furgonetas eléctricas. Estas llevan etiqueta “0” así que pueden circular sin ningún tipo de problema.

Son ideales para las ciudades, pues aunque es cierto que no tienen una autonomía demasiado elevada, esto no es un impedimento si no se sale de la zona urbana. Aquí siempre hay enchufes disponibles, en donde cargar en un momento dado.

Por si fuera poco, las Administraciones están haciendo lo posible con el fin de que nos pasemos al vehículo eléctrico. Esto significa que siempre hay ayudas, subvenciones, algún tipo de exención fiscal, etc., lo que hace a estas furgonetas aún más apetecibles para la ciudad.

La mayor parte de los autónomos no concibe otra manera de conducir una furgoneta que el renting. Esta forma de adquirir un vehículo tiene muchas ventajas en su caso, tanto que es la manera preferida de pagar por la furgoneta, que ahora incluso puede ser eléctrica si no se hacen muchos kilómetros al día.