Azada Verde, la ONG que pedalea para luchar contra la pobreza

Mejorar la vida de las personas más desfavorecidas del mundo a base de proyectos que también cuiden el planeta. Este es el objetivo principal de Azada Verde, una Ong española que trabaja en Mozambique con familias que se encuentran en situación de hambre y pobreza.

Azada Verde nació en 2017, y desde ese año ha llevado a cabo diferentes proyectos en el país africano y ha mejorado la vida de cientos de personas, sin descuidar la atención al medioambiente.

Con esta doble misión, y una total transparencia en todo su aparato de gestión, obtención de recursos económicos y destino de este dinero, Azada Verde ha impulsado en los últimos años un nuevo proyecto. Se trata de un sistema de mejora de cultivos que ayuda cada día a las familias agricultoras más desfavorecidas de Mozambique.

Hacer el trabajo menos duro y más rentable

El proyecto de la asociación se centra en desarrollar sistemas alimentarios locales y sostenibles que generen un impacto social, económico y medioambiental en las regiones donde se llevan a cabo.

Lo hacen a través de distintos proyectos como la instalación de bicibombas o sistemas de riego solar que elevan los rendimientos de los cultivos y, sobre todo, facilitan la vida a los trabajadores, permitiendo que puedan conciliar trabajo y descanso, algo muy poco habitual en el país africano.

En una nación en la que más del 80 % de la población reside en áreas rurales y depende de la agricultura, modernizar los sistemas de trabajo es una prioridad absoluta. Y hacerlo desde una perspectiva concienciada con el entorno natural y el cuidado del planeta es un acierto.

Los datos son esclarecedores: tan solo en 2022 un total de 151 familias de las zonas más desfavorecidas del país han comenzado a explotar sus propios cultivos de hortalizas, generando materia prima tanto para consumo propio como para la venta.

¿El resultado de este plan? Los 269 kilos de hortalizas recogidos de media por cada núcleo familiar han asegurado su manutención y la neutralización del hambre en esas casas.

Además, con más del 70 % de cultivo dedicado a la venta, se han elevado los ingresos económicos. De esta manera, las familias pueden ahorrar, dotarse de mobiliario, mejorar sus hogares, asegurar el acceso a la educación de los menores… En definitiva, hacer frente a un sinfín de realidades negativas que se han visto paliadas por el trabajo de esta ONG.

Una mirada global: 100 acciones sostenibles del día a día para cambiar el mundo

Aunque Azada Verde centra su trabajo en Mozambique, para la asociación, el cambio debe surgir en todos los puntos del planeta. Si han demostrado que la agricultura sostenible puede ser una solución en zonas de hambre, ¿qué se puede hacer en los países desarrollados para salvar el planeta?

Pequeños gestos consiguen grandes resultados. Este es el espíritu en el que se basa el libro 100 acciones sostenibles del día a día para cambiar el mundo. Se trata de un e-book de descarga gratuita donde se detalla un centenar de pequeños cambios que cualquiera puede incluir en su día a día para mejorar el planeta.

Apostar por los materiales reciclados, reducir el malgasto de alimentos o usar el transporte público con más asiduidad son solo algunos de estos pequeños consejos que harán que el planeta sufra menos. Pequeñas victorias que alargarán la vida de la Tierra para las nuevas generaciones.

Gracias a proyectos como Azada Verde, cada vez más personas son conscientes de que hay que apostar por la solidaridad y el amor "verde" al entorno son los motores que propiciarán el cambio, tal y como las autoridades europeas han marcado en planes a medio plazo como la Agenda 2030, en la que esta asociación española basa sus valores iniciales.