Gesto serio de Pere Aragonès en su primer encuentro con Sánchez tras el ‘caso Pegasus’
El presidente del Gobierno sí ha sonreído al jefe del Govern de la Generalitat de Cataluña en la escalinata del Palacio de la Moncloa
Pedro Sánchez y Pere Aragonès vuelven a reunirse públicamente en el Palacio de la Moncloa un año después de otro encuentro similar. Las elecciones anticipadas en Andalucía habían paralizado los contactos entre el Gobierno de España y el Govern de la Generalitat de Cataluña en el marco de la llamada “mesa de diálogo”.
Ambos presidentes han querido retomar ese diálogo con un encuentro oficial en Madrid, que se ha celebrado este viernes 15 de julio en el Palacio de la Moncloa.
Sánchez ha saludado a Aragonès en lo alta de la escalinata de entrada a la residencia oficial del presidente del Gobierno. El líder del Ejecutivo central ha mostrado una sonrisa mientras ofrecía la mano y la estrechaba con el presidente autonómico de Cataluña.
Aragonès, por su parte, ha posado con un gesto más serio, más allá de un amago de sonrisa en el primer contacto. Al posar ante las cámaras, ha recompuesto un gesto de mayor seriedad. Tras unos segundos, Sánchez le ha invitado a entrar en el Palacio de la Moncloa.
Se trata de la primera reunión entre Sánchez y Aragonès después de la polémica sobre los presuntos espionajes con el programa israelí Pegasus a dirigentes independentistas catalanes. Ambos habían coincidido en algún acto en Barcelona, pero no se habían reunido a puerta cerrada.
Hay que recordar que Pere Aragonès fue uno de los señalados en el informe de Citizen Lab como presunta víctima de espionaje en su teléfono móvil. La ya ex directora del Centro Nacional de Inteligencia reveló en el Congreso de los Diputados que el móvil del presidente del Govern de la Generalitat fue intervenido con autorización judicial del Tribunal Supremo, y Aragonès se querelló contra ella.
También se supo posteriormente que el móvil de Pedro Sánchez, así como de varios ministros, fue atacado con Pegasus, por lo que el caso del espionaje dio un giro importante. Aún así, los independentistas catalanes mantienen su campaña contra España por, según ellos, perseguir a disidentes políticos con herramientas de espionaje invasivo. Por ello, el Govern catalán sigue pidiendo explicaciones y responsabilidades al Gobierno de España.
La polémica de los pinchazos se cobró el cese de Paz Esteban como directora del CNI, y la Audiencia Nacional está investigando las intrusiones en los móviles del presidente y los ministros.
