Por la boca… Artificial a lo mejor, pero inteligencia poca
Está claro que la inteligencia artificial, junto con algunos supuestos especialistas en información deportiva, hablan de la historia con la ligereza que da el conocer solamente los últimos años, y despreciar el resto de esa historia que tan pomposamente esgrimen en sus elucubraciones, aludiendo nada más que a los últimos campeonatos y a las recientes victorias y de ahí para atrás, nada.
Algunos, boquiabiertos; otros, escépticos; unos pocos, asustados y la mayoría indiferentes, los ciudadanos de a pie reciben cada día nuevas informaciones y noticias sobre eso de la inteligencia artificial, que casi nadie entiende, ni sabe de qué va y que los tontos de siempre contemplan embobados, mientras son muchos los que aseguran que, muy probablemente, alguien se va forrar, sino es que se está forrando ya.
Pero por casualidad, a la inteligencia artificial le ha dado por hacer una lista de los mejores futbolistas españoles de la historia y ahí, el mito de lo artificial y de la inteligencia, se ha venido abajo y “la ha cagado”, como dice mi portero, porque de eso sí que sabe el común.
En esa lista y por orden, se supone que de méritos, aparecen, Alfredo Di Stéfano, Xavi Hernández, Iker Casillas, Raúl González, Andrés Iniesta, Francisco Gento, Carlos Puyol, Xabi Alonso, David Villa y Fernando Hierro.
Está claro que la inteligencia artificial, junto con algunos supuestos especialistas en información deportiva, hablan de la historia con la ligereza que da el conocer solamente los últimos años, y despreciar el resto de esa historia que tan pomposamente esgrimen en sus elucubraciones, aludiendo nada más que a los últimos campeonatos y a las recientes victorias y de ahí para atrás, nada.
Porque, si hablamos de “la historia del fútbol español”, salvo los nombres indiscutibles de Alfredo Di Stéfano y Francisco Gento, los otros ocho son perfectamente, con toda justicia, intercambiables con futbolistas tan buenos o mejores que ellos en sus respectivas demarcaciones. Y ahí están Luis Suárez, Luis del Sol, Juan Gómez “Juanito”, Enrique Collar, Feliciano Rivilla, Joaquín Navarro “el fifo”, Emilio Butragueño, Gustavo Biosca, Juan Segarra, César Rodrígez o el fenomenal Ladislao Kubala (tan español como lo pueda ser Di Stéfano) Piru Gaínza, Telmo Zarra, José Luis Panizo, Jesús Garay, Juan Arza, José Ángel Iríbar, Juan Carlos Quincoces, Rafael Gordillo, Alfonso Silva, Luís Molowny, Julen Guerrero, Roberto López Ufarte, José Eulogio Gárate, Luís Miguel Arconada… por no hablar de los legendarios, Ricardo Zamora, Pepe Samitier, Isidro Lángara, José Luís Belauste o Jacinto Quincoces.
Porque por muy artificial que se sea y cuando se presume de inteligente, para hablar de historia, hay que recorrerse toda la historia.
Y es lo que dice mi portero: además de “cagarla” están engañando a mis nietos. Y lo dice con toda la razón.
Como siempre.
La carcajada: Lo dijo Steve Polyak, neurólogo estadounidense: “Antes de hablar de la inteligencia artificial ¿por qué no hacemos algo sobre la estupidez natural?
