El fenómeno Rajoy

Me refiero a que Rajoy es algo extraño en la política española, que posiblemente en el futuro dará lugar a alguna que otra tesis doctoral. Si no, ¿cómo se entiende que un político que aparece habitualmente poco valorado en las encuestas de opinión sea en estos momentos la única alternativa real de poder en España?.

Leyendo a los cronistas políticos en estos últimos meses, nadie ha dado un euro por él. De hecho, el triunfo de Rajoy es el fracaso de todos los que han escrito habitualmente sobre él. Pero ésto también ha sucedido durante los últimos años. En las apuestas, siempre Rajoy aparecía como perdedor. Y, desde luego, yo mismo, que estoy escribiendo este artículo, no podría decir cuál es la clave más íntima de este político gallego, tan vilipendiado y tan triunfante a la vez.

Es verdad que hay factores externos que pueden explicar lo que está sucediendo en estos días. Por ejemplo, el miedo que da Podemos, lobo disfrazado con piel de cordero. O los tremendos errores de Pedro Sánchez, de ir contra el poder real de su propio partido y buscar un gobierno con independentistas. O la tremenda ambición de Albert Rivera, deseoso de meter cuchara como sea en la situación política española.

Pero, ¿cómo explicar que los supuestos casos de corrupción no le hayan afectado más de lo indispensable?. ¿O los virajes en el programa electoral, como fue el caso del aborto, al final tampoco le hayan pasado una excesiva factura?.

Quizás podríamos explicarlo hablando de la gran fortaleza síquica y mental de Rajoy, impasible ante los acontecimientos contrarios a él y su partido. O su excepcional manejo de los tiempos. O su frialdad y su desprecio ante los “becarios” que tenía enfrente: Pedro Sánchez, Albert Rivera o Pablo Iglesias.

Siendo verdad todo lo anterior, a mi me parece que Mariano Rajoy ha ganado porque conoce España como nadie. Y sabe cuáles son las corrientes profundas de la sociedad española, que van en la línea de la seguridad y la estabilidad. Llama la atención que, en todos estos años, la sociedad española ha estado básicamente tranquila. No me refiero a que no haya habido huelgas, sino a que  la gente, sin dejar de estar enfadada, ha mantenido una tranquilidad de fondo. Y, claro, todo el mundo tiene el convencimiento de que la recuperación económica es, entre otras cosas, fruto de una sociedad estable y tranquila.

Otro elemento, en mi opinión decisivo en el triunfo de Rajoy, ha sido la unidad de su partido. ¿Qué es un partido donde ha imperado el dedo de Rajoy?. Pues sí. Pero parece que no les ha ido nada mal. En este sentido, esperemos que en la renovación que comienza ahora en el PP entre gente donde de verdad les interese el bien de la sociedad y no hacer negocios.

¿Cómo va a ser el futuro inmediato?. Mariano Rajoy habla de legislatura de cuatro años. Yo creo que eso es imposible. Como mucho, hasta mayo, en que legalmente podrá disolver el Congreso. Mientras tanto, ya se habrá empezado a producir la renovación del Partido Popular y podrán ir a las elecciones con caras nuevas y creíbles.

Luis Martínez Vázquez de Castro

 

Catedrático de Derecho Civil

Universidad Jaime I

Castellón

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