Ley de amnistía: Sánchez acepta nuevos cambios para satisfacer a Puigdemont

A 8.000 kilómetros de distancia, el presidente Pedro Sánchez confirma que, al final sí, habrá nuevos cambios en ley de amnistía.

El acuerdo está cerca y, aunque el presidente no aclara qué modificaciones son las que se están negociando, sí reconoce que son para dar más garantías a Junts y asegurarles que todas las personas vinculadas al 'procés' quedarán amnistiadas.

Durante estos días desde el Ejecutivo y desde el PSOE han asegurado que los delitos de terrorismo no se iban a tocar, que esa seguía siendo su línea roja.

Pero está por ver la fórmula final de un acuerdo que podría anunciarse en las próximas horas. Un acuerdo que Emiliano García-Page, el barón socialista más crítico, ha vuelto a censurar. Para el PP esos cambios son un nuevo chantaje y avisan: van a continuar su cruzada contra la norma por tierra, mar y aire.

A la espera de que el silencio que hay en torno a los nuevos cambios en la ley de amnistía se rompa.

Con la Ley de Amnistía había dos opciones: que Junts cediera o Pedro Sánchez tragara. Una vez más, ha sido lo segundo", así resumen en el Partido Popular lo que ha sucedido con esta norma después de que el presidente del Gobierno confesara en las últimas horas que desde el PSOE ya han asumido nuevos cambios en la ley para dar más garantías a Carles Puigdemont.

El pacto entre el PSOE y Junts se anunciará en las próximas horas tal y como ha explicado Sánchez a los periodistas que le acompañan en su viaje oficial a Brasil. El presidente del Gobierno, en un momento de máxima debilidad en el que está asediado por la corrupción, ha vuelto así a aceptar cambios en la ley para dar "más garantías" a Junts y ha prometido que todos los separatistas serán "indultados".

"Quedan pocos minutos, pocas horas para conocer la transaccional", ha dejado caer Sánchez en una comparecencia con Lula da Silva desde el Palacio de Planalto. "Vamos a lograr un acuerdo", se ha mostrado esperanzado el presidente del Gobierno quien ha prometido que la norma "entró constitucional y saldrá constitucional y alineado con el derecho europeo".

Desde el separatismo apuntan a un "cambio más bien cosmético", mientras aseguran que el acuerdo y la negociación se basa en las enmiendas vivas que Junts y ERC mantuvieron hasta el último pleno. Hay que recordar que mantuvieron enmiendas sobre el preámbulo, las multas, la traición y, sobre todo, el terrorismo. Sobre una de estas cuatro pivotaría el cambio aunque ,el que menos visos de ser aceptado por el PSOE, es la de traición.

La enmienda transaccional se registrará este jueves en la Comisión de Justicia. Antes, a las nueve y media de la mañana, está prevista una rueda de prensa del ministro de Presidencia y Justicia, Félix Bolaños, para presentarla.

Desde el PP critican que "el independentismo hace negocio de la debilidad parlamentaria del presidente del Gobierno" y recuerdan que Sánchez "llegó a secretario general del PSOE por Ábalos y por Koldo pero es presidente gracias a Carles Puigdemont".

Consideran desde Génova que "dice mucho de este gobierno que no le importe quedar como una marioneta del independentismo con tal de que se hable de eso y no las maletas de Delcy, de los contratos de Armengol y Torres o de la esposa del presidente, Begoña Gómez".

El portavoz del PP en el Congreso, Miguel Tellado, ha valorado esta noticia en una entrevista en Telecinco en la que ha explicado que "todo parece indicar que el PSOE se ha plegado, una vez más, a las exigencias del independentismo".

"Estamos ante una ley que es inasumible, un chantaje político, y estamos viendo como el chantajeado (Pedro Sánchez) acepta constantemente los cambios y las presiones de quien pretende que se legisle a la carta para beneficiar a personas con nombres y apellidos que han delinquido y que están pendientes de someterse a la Justicia", en referencia a Puigdemont.

"Es una aberración política, jurídica y moral", ha resumido el dirigente del PP y mano derecha de Alberto Núñez Feijóo en el Partido Popular que también ha acusado al PSOE de "desempolvar" el acuerdo con Junts para tratar de tapar y sofocar el "caso Sánchez".