Mejor tratamiento antiacné

El acné es una enfermedad de la piel que se puede tratar con Probiac, un probiótico y tratamiento natural que se caracteriza por regular la microbiótica intestinal y disminuye las lesiones inflamatorias. Su eficacia y efectividad está más que demostrada, llegando a mejorar el aspecto hasta en un 78 % y aportando mayor seguridad y confianza a las personas afectadas.

Aunque cualquier persona puede tener acné, es mucho más común entre los adolescentes y los jóvenes. Principalmente, influye en la estética y autoestima de la persona; no obstante, este tipo de remedio ayuda a mejorar la salud de la flora intestinal y tratar este problema.

Lo más habitual, tras aplicar un gran número de tratamientos para frenar la alteración cutánea, es que el acné vuelva a aparecer. Es por esto que se hace necesario un producto, que no actúe solo como regulador sebáceo, sino que sea capaz de normalizar la flora intestinal.

Probióticos para mejorar la flora intestinal

Sin lugar a dudas, las colonias bacterianas de nuestro intestino están directamente ligadas a la piel; por lo tanto, no es posible tener una piel bonita si el intestino no goza de buena salud.

En los últimos años, los probióticos se han convertido en la clave para mejorar la salud digestiva. Ya sea por cultivos activos que se encuentran en ciertos alimentos como los yogures o por suplementos que actúan en la flora intestinal. Su ingesta nutre la piel para que aumente la diversidad bacteriana, tan crucial para nuestro organismo.

Los nuevos estudios ponen de manifiesto los beneficios de los probióticos más allá del tracto digestivo al actuar sobre la piel. Las personas propensas al acné han mostrado una notable mejoría y los dermatólogos los consideran como un tratamiento natural muy beneficioso.

El sistema inmunológico hace frente a estos microorganismos que viven en la dermis. Esta amenaza potencial desencadena una defensa a modo de inflamación y enrojecimiento, por este motivo, el uso del probiótico previene la aparición de las bacterias y parásitos que causan esta reacción.

Un probiótico tiene propiedades antimicrobianas, lo que significa que puede favorecer el equilibrio de la dermis. Optar por el uso de probióticos como fuente de energía es una opción muy recomendable y saludable. En este sentido, cabe destacar que la inulina en polvo es una fibra prebiótica con muchos beneficios. La podemos encontrar de forma natural en alimentos como los plátanos, cebollas, patatas y el vinagre de sidra.

Los beneficios de Probiac

El uso de Probiac como tratamiento natural y complemento alimenticio es ideal para combatir el acné. Gracias a sus cepas microbióticas (bifidobacterium animalis lactis,  lactobacillus acidophilus, bifidobacterium bifidum, lactobacillus bulgaricus y lactobacillus rhamnosus) los resultados son muy beneficiosos.

El uso de este probiótico cuando se sufren estos trastornos hormonales regula la flora intestinal y reduce las lesiones inflamatorias. Además, solo se necesita tomar una cápsula diaria durante 12 semanas.

Por otro lado, cabe destacar que la Organización Mundial de la Salud ha definido los probióticos como “microorganismos vivos que, si se administran en cantidad suficiente, tienen efectos beneficiosos para la salud”. Por lo que no producen efectos secundarios nocivos. 

Finalmente, cabe destacar que los estudios han demostrado que Probiac reduce hasta un 78 % las lesiones inflamatorias en un periodo aproximado de 3 meses.

En resumen, una piel propensa a acné necesitaría equilibrar la flora intestinal para evitar la aparición de granitos e inflamaciones que generan malestar y disminuyen la autoestima. La apuesta por tratamientos naturales como PROBIAC ayudan a conseguir resultados muy positivos en pocas semanas.