La fusión Caja Duero-Caja España se retrasa: más exigencias de Banco de España, “precipitación de la Junta” y una ‘due dilligence’ complicada
El ‘proceso integrador’ que abrirá las puertas a la reestructuración del mapa de cajas de ahorros en Castilla y León se está retrasando. Fuentes del sector financiero achacan el retraso de los planes de Caja Duero y Caja España a la “precipitación” de los políticos regionales y a las nuevas exigencias del Banco de España para la unión.
“Una vez lanzado el FROB, la verdad es que estamos todos a la espera de ver qué pasa con Caja Duero y Caja España”, el responsable de una caja de ahorros catalana explica así a El Confidencial Digital la fase en la que se encuentra el rediseño del mapa de cajas de ahorros españolas.
No obstante, lo que ambas entidades han dado en denominar “proceso amistoso de integración”, no acaba de ponerse en marcha. Fuentes del sector financiero resumen en tres los motivos de este retraso:
-- Nuevas exigencias del banco central. Miguel Ángel Fernández Ordóñez ha sido claro en su mensaje a las dos cajas castellano-leonesas: necesitan un tercer socio que ‘tire del carro’, ya que los ratios de morosidad, solvencia y caja “no son para echar cohetes”, de acuerdo con un inspector del Banco de España consultado por ECD. Cabe recordar que una vez integradas, su cartera de crédito hipotecario sería inferior al 1% de la cuota del mercado, mientras que otros aspectos, como el nivel de mora, son más preocupantes: la leonesa arrastra una morosidad del 5,28%, al que se sumaría el 3,65% de la salmantina.
-- Fuentes con acceso al texto del decreto ley relativo para la creación del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) destacan que “ni se contemplan ni se van a permitir fusiones entre entidades tambaleantes”, por lo que recomiendan seriamente la búsqueda de socios complementarios que refuercen los balances y aporten sinergias.
-- “Precipitación de la Junta” de Castilla y León al suscribir un convenio ratificado por PP, PSOE, CC.OO y Cecale (patronal de empresarios de la región) pero que deja fuera a los protagonistas de lo firmado: las cajas de ahorros. Directivos de Caja España adelantan que “con decisiones así, no puede salir nada positivo”. Tanto es así que los impositores de Caja Duero presentarán una queja formal ante el Banco de España por el proceso de integración de las cajas de ahorro de Castilla y León y por el por el contenido del acuerdo firmado por políticos, empresarios y sindicatos locales. La queja también se dirigirá al presidente de la Junta.
En ámbitos financieros de Castilla y León recuerdan en este sentido que “todo empezó con una cena en Valladolid entre el número dos de la Junta y los directores generales de ambas entidades, pero que no contó con la presencia de ninguno de los presidentes de las cajas en cuestión”.
-- Respecto al calendario que manejan los responsables de la fusión, fuentes cercanas a los encargados de realizar la auditoría externa apuntan que “está habiendo ciertas complicaciones con la due dilligence, lo que posiblemente retrasará las fechas establecidas inicialmente”. Se trata, según estas mismas fuentes, de “dificultades típicas de estas fechas, en las que se cierran trimestres, ejercicios fiscales, etc.”
-- Mientras, voces oficiales de Caja Duero hacen hincapié en que “todavía no hay ninguna fecha oficial” y que esperan los resultados del informe confidencial que prepara KPMG “para julio o agosto. De esta forma, se podrían alcanzar las fechas orientativas, que tal y como se adelantaba en este confidencial –léalo aquí- permitirían iniciar la integración a la vuelta del verano, en septiembre.
