Por qué esta alternativa es mejor para tu perro que una residencia canina tradicional

Las residencias caninas siempre han estado en la mente de todos los dueños de perros que se veían obligados a dejar temporalmente a sus mascotas en algún sitio. Sin embargo, las cosas parecen estar cambiando para los hoteles de perros. La llegada de las nuevas tecnologías, el concepto de economía colaborativa y la concienciación cada vez mayor sobre el bienestar animal están cambiando este modelo de negocio.

Las alternativas a las residencias para perros han empezado a crecer y están siendo una fuerte competencia para este viejo sistema. Los cuidadores especializados son la punta de lanza de este nuevo modelo de alojamiento para perros. El servicio suele ser más barato, personalizado, y permite que el dueño o dueña tenga contacto constante con su mascota a través de fotos y vídeos que le manda el cuidador.

Cuidadores profesionales, la alternativa a las residencias

La figura del cuidador profesional de perros está muy alejada de la imagen de alguien sin formación especializada que quiere sacarse “unas pelillas” cuidando animales. Los cuidadores se están profesionalizando gracias a la formación de empresas del sector de mascotas. Un ejemplo de esto es Snau, una start-up que ha creado un servicio de cuidadores especializados denominados snauers.

Los snauers pasan un proceso de selección en la empresa en el que se valora sus habilidades para cuidar a un perro, las medidas de seguridad, lenguaje animal o cómo gestionar la convivencia de más de un perro, entre otras cosas.

La intención de la compañía es personalizar al máximo las atenciones al perro, a la vez de asegurar un contacto dueño/perro las 24 horas del día. Con este se pretende que el perro experimente la menor cantidad de estrés posible.

Este sistema de alojamiento alternativo se basa en que el dueño y el snauer hablen antes del servicio sobre los hábitos y rasgos especiales del perro, con el fin de adaptar el servicio al animal y crear una relación de confianza.

El dueño puede especificar si quiere que su perro esté con otros en la casa del snauer o que no tenga más compañía canina. Otra ventaja que contempla esta alternativa es que mantiene la alimentación del perro, ya que el snauer cuenta con las indicaciones previas del dueño/a, además de un contacto directo por teléfono por si alguna de las dos partes tiene alguna duda.

Conciencia animal

La llegada de este servicio especializado y tan personalizado son un problema para el negocio de las residencias caninas, pero también lo es el movimiento sobre la protección animal, que ha expandido la conciencia animalista.

Algunos hoteles para perros tradicionales suelen estar atestados de animales y esto puede ocasionar estrés a un perro con problemas sociales. Igualmente, las residencias suelen alimentar a los animales a la vez y con los piensos que compran. Esto puede ser un problema para los perros con dietas especiales o con problemas de intolerancias alimenticias.

También, muchas residencias caninas utilizan cheniles, grupos de jaulas contiguas que impiden la visibilidad entre perros, lo que hace que estos perciban el olor de sus vecinos de jaula, pero no los puedan ver. Esta situación puede ser estresante para un perro. Además, los perros encerrados en estos cheniles están a veces a merced del frío, o el dueño o dueña tiene que pagar más para que el animal tenga calefacción.

En conclusión, son los dueños los que deciden dónde dejar a sus mascotas y, aunque estos “hoteles” para perros siguen siendo un negocio boyante, las alternativas a las residencias se están haciendo notar y parecen ganarse la confianza de perros y humanos.

Síguenos en Facebook e Instagram para enterarte de las últimas noticias para tu mascota.