Moratinos imita a Acebes, con una penosa gestión informativa de la crisis en el consulado suizo

El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, concluyó la jornada del lunes transmitiendo tranquilidad a la ciudadanía española tras el asalto ocurrido en el Consulado de España en Berna: no desaparecieron documentos ni se sustrajeron objetos, dijo. Añadió que el caso se resolvió de “manera satisfactoria y con una buena coordinación" con las autoridades helvéticas. Sin embargo, Moratinos hizo una gestión informativa de la crisis insatisfactoria y deficiente. A las 11.30 de la mañana, el ministro de Exteriores anunció el final del asalto al consulado español en Berna: “Los encapuchados acaban de salir, por tanto el caso está resuelto”. Lo hacía desde Madrid. A escasos metros del consulado, la Policía suiza tenía que desmentir al ministro y afirmaba que el cordón de seguridad se mantenía, mientras trataban de contactar con los tres delincuentes. Pasadas las 14:00 horas, agentes especiales penetraban en el edificio a la búsqueda de los asaltantes. A Moratinos, diplomático de carrera, se le suponen ciertas dotes de prudencia y saber estar en casos como éste, donde es preciso extremar la calma y no dejarse llevar por la impaciencia. Y si no, que se lo digan a Ángel Acebes. Guindilla al ministro por su torpeza.