Cómo influye el clima en la curación del jamón ibérico

El jamón ibérico es, sin lugar a dudas, el manjar más apreciado de la gastronomía española. Esto se debe a su sabor único y a su delicada textura, sin olvidar su gran versatilidad en la cocina e innumerables beneficios que ofrece a nuestro organismo. Una joya en potencia capaz de deleitar a los paladares más exquisitos.

Sin embargo, lo que muchos no saben es que el clima en el que los jamones realizan su periodo de curación, desempeña un papel crucial para el resultado final. Desde las altas montañas hasta las soleadas llanuras, cada región de España tiene su propia influencia climática que afecta a cada jamón de una manera totalmente distinta y peculiar. Para conocer cada detalle, en este artículo vamos a contar como el clima modela el carácter y la calidad de este alimento gourmet. Así conseguir un buen jamón será mucho más seguro, como optar por comprar jamón guijuelo.

Denominaciones de origen, clima y características del jamón ibérico

En España contamos con varias Denominaciones de Origen (DOP) que certifican la calidad y autenticidad de cada uno de los jamones ibéricos. Cada una de ellas está asociada a una determinada región, donde el clima desempeña un papel fundamental en el proceso de curación. 

En nuestro país existen 4 DOP. Cada una de ellas se sitúa en una zona diferente y cuenta con su clima particular, el que influye en las características únicas del producto final. De todo ello y de cómo conseguir el jamón guijuelo online, hablamos a continuación:

Dehesa de Extremadura

Abarca vastas extensiones de dehesas en la Comunidad de Extremadura, una región caracterizada por un clima continental mediterráneo con inviernos fríos y veranos muy calurosos. Existe desde 1990 y abarca zonas como la Sierra de Montánchez en Cáceres o la Sierra de San Pedro en Badajoz.

Los inviernos fríos y veranos calurosos favorecen la lenta maduración del jamón, resultando sabores intensos y profundos, con una textura firme y jugosa. El tiempo de curación es de 3 a 4 años.

Jabugo

Esta población está situada en Huelva, Andalucía. Las zonas que abarca son el Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche. Su certificación data desde 1998. La zona ofrece un clima mediterráneo subtropical, con inviernos suaves y veranos cálidos y secos.

Al tener temperaturas más elevadas durante el verano y la primavera, se consigue que la curación sea más rápida, influyendo en la infiltración de grasa en el jamón, lo que le otorga un sabor dulce y aromático, con una textura suave que se funde en la boca. El proceso de duración puede durar entre 12 y 48 meses.

Los Pedroches

Está ubicada en la provincia de Córdoba, en Andalucía. Disfruta de un clima mediterráneo continental con inviernos fríos y veranos calurosos. Ha sido la última DOP, ya que se concedió en 2006.

El proceso e influencia del clima en su curación es muy similar a la de sus vecinos de Jabugo. Sus características principales es una carne de tono rosado, aroma suave y sabor con matices afrutados. El tiempo de curación suele ser de 48 meses. 

Guijuelo

Es la más antigua de las DOP, conseguida en 1984. Lo encontramos en la provincia de Salamanca. Su clima es el característico continental, pero con influencia atlántica, es decir, inviernos fríos y con viento, y veranos suaves y húmedos. 

Los inviernos en esta zona son muy fríos, ventosos y largos. Con ellos se consigue que el jamón salamanca guijuelo necesite menos proporción de sal para su curación, además de menor tiempo. Al contar con un verano suave, permite la correcta infiltración de la grasa, otorgándole un sabor excelente y muy peculiar. El tiempo mínimo de curación es de 24 meses.

Ya hemos visto como el clima juega un papel fundamental en la curación del jamón ibérico, influyendo en su sabor, aroma y textura. Cada región de España aporta unas características únicas y particulares a sus jamones, pero es en Guijuelo donde se alcanza la excelencia en calidad gracias a sus equilibradas condiciones climáticas. El jamón guijuelo es saborear el resultado de siglos de tradición y el influjo delicado de la naturaleza en cada bocado.