Seguro de vida: ¿un producto para todo el mundo?

¿Seguro de vida sí o seguro de vida no? Esta es una pregunta más que razonable, sobre todo entre aquellas personas que no tienen claro en qué consiste este tipo de pólizas y qué beneficios pueden tener para su familia y herederos. ¿Todas las personas deberían contar con un seguro de vida? Lo cierto es que actualmente existen muchísimos productos relacionados con este servicio y, por tanto, estas pólizas están adaptadas a todos los perfiles de personas.

Lo importante a la hora de contratar un seguro de vida essaber cuándo y por qué hacerlo. Teniendo claro estos dos puntos, el usuario puede tener la tranquilidad de estar haciendo lo correcto a la hora de tomar una decisión sobre si pagar la póliza o no.

¿Qué es un seguro de vida?

Un seguro de vida es, en pocas palabras, una protección económica que ayudará a la familia y herederos en caso del fallecimiento del tomador. Al contratar este tipo de productos, el cliente se asegura que sus seres queridos recibirán una cantidad económica si pierden la vida.

Pero no solo eso: en el caso de accidentes graves o invalidez, la mayoría de seguros también incluyen pagos de primas que servirán para que esta persona y los suyos se adapten cómodamente a la nueva situación. De manera adicional, estos servicios también cubren otro tipo de circunstancias relacionadas con el deceso, como el pago del entierro o la realización del testamento y del documento de instrucciones previas.

¿Cuándo contratar un seguro de vida?

La mayoría de los profesionales del sector coinciden al establecer la edad recomendable para tomar el seguro de vida entre los 30 y los 45 años.

Sin embargo, esta edad puede ser tardía en el caso de personas con hijos o patrimonio. De hecho, la contratación de un seguro de vida es una de las condiciones que suelen poner las entidades bancarias cuando se va a firmar una hipoteca.

Teniendo en cuenta todo esto, la respuesta más certera a la pregunta de cuándo hacerse un seguro de vida es cuanto antes. Sobre todo, se debería tener muy en cuenta en aquellos momentos en los que una persona ya comienza a manejar su dinero propio, a tener propiedades o familia.

¿Por qué contratar un seguro de vida?

Más allá de la protección familiar a la que ya se ha hecho referencia, la contratación de un seguro de vida es una tranquilidad para el tomador desde el momento en el que firma el contrato con la empresa aseguradora.

Esta persona puede vivir con la seguridad de que sus hijos podrán realizar sus estudios sin problemas, su pareja podrá hacer frente al pago de la hipoteca y todos podrán seguir haciendo su vida sin ningún tipo de problema en los primeros años.

Todo ello se suma al hecho de que la contratación de este servicio no supone un gran desembolso económico. Anualmente, el tomador del seguro tendrá que pagar una póliza reducida, si se tiene en cuenta a qué primas se está optando en caso de que se tenga que ejecutar el seguro.

Sin duda, dentro de las herramientas de estabilización financiera en caso de fallecimiento, los seguros de vida son la opción más recomendable para un alto porcentaje de la población.