Jorge Juan, marino de la Real Armada Española en el CCL aniversario de su muerte

Jorge Juan y Santacilia nació en Novelda (Alicante) el 5 de enero de 1713. Oficial de la Real Armada, matemático, astrónomo, académico de distintas sociedades científicas de Europa, embajador del reino. Publicó en 1771 Examen marítimo, estudio sobreingeniería naval, su obra más relevante. Hombre de ciencia y de milicia, un ilustrado español cuyo genio brilló en la Europa del s. XVIII. Recibió el sobrenombre de Sabio Español. Toda su vida fue entregada generosamente a España, a su rey y a la RealArmada… porque participó de un sueño, de una esperanza: situar a su patria, una vez más, entre las potencias navales del mundo.

Son palabras suyas escritas a Miguel Múzquiz en 1766: «El amor de la patria me llena de deseos de ser útil y, mucho más, las evidentes demostraciones de las ruinas que nos espera […]» .

Yo creo que los hombres deben aquilatarse por las aportaciones que dejan a lo largo de sus vidas. Viene al caso el proverbio de Cicerón: póngase ante los ojos los ejemplos dignos de un hombre , que en este marino fueron muchos, todos de calidad y sinceros.

Hay biografías diáfanas como una fría mañana de invierno y otras cuajadas de hazañas e incertidumbres como una furiosa tempestad. De las primeras solo queda una leve caricia de aire, mientras que de las segundas quedamos abrumados por el coraje del personajeque palpita todavía a través de sus obras.

No habían transcurridos muchos años desde la firma de la Paz de Utrecht cuando Jorge Juan ingresa en la Real Academia de Guardias Marinas de Cádiz el 10 de marzo de 1730. La situación de España tras la guerra de Sucesión era deplorable, pero de esa desolación surgió la idea de devolver a España el prestigio y la posición que mantuvo durante siglos. El rey Felipe V tuvo ese afán durante todo su reinado. Esa política de reputación se materializó en distintos proyectos desarrollados por los ministros de Marina:   el abate Alberoni, Patiño y, posteriormente, el marqués de la Ensenada.

Sobre este contexto de reconstrucción y de búsqueda de excelencia Jorge Juan tuvo la oportunidad de mostrar y aplicar sus conocimientos y aptitudes en distintos ámbitos, desde sus operaciones militares como marino de guerra hasta la construcción náutica, laarquitectura y la formación de marinos a través de las Reales Academias de Guardias Marinas.

De sus innumerables aportaciones distinguimos cuatro aspectos en donde destacó con especial intensidad. Pocas son de las muchas que hubo, pero suficientes para esbozar un semblante indicativo de lo extraordinario de un hombre, como extraordinaria fue la devoción a su rey y a España para hacerla más próspera y respetada entre las naciones más principales del mundo.

La primera contribución la encontramos en su trabajo de investigación más conocido por el que se ganó el prestigio de toda Europa y fue medir el ecuador de la tierra. Medir la longitud de un arco de meridiano consiste en determinar la distancia que separa dos puntos de un círculo máximo, cuya diferencia de latitud es conocida. De los resultados de estas mediciones, se concluyó que la figura de la tierra en toda su posición es la de una esferoide chata hacia los polos.

Francia se encontraba sumamente interesada en precisar esa medida. Para verificarla se decidió por un comité de científicos de la Académie Royale des Sciences de París,tomar mediciones en Laponia y en Quito. 

Para la estancia en el virreinato del Perú, Luis XV solicitó a Felipe V permiso para acometer la medición en territorio español. Nuestro soberano asintió imponiendo una condición: la expedición francesa debería incorporar a dos científicos españoles que fueron Jorge Juan y Antonio de Ulloa junto a su equipo tecnológico adquirido en Paris de similares características al transportado por los galos. 

Para no desmerecer ante los académicos, por una exigencia de protocolo, podemos llamarlo así, los jóvenes guardiamarinas fueron ascendidos a tenientes de navío, integrándose, desde este momento, en la expedición geodésica franco-española.

Tras diez largos años se tomaron las mediciones precisas con gran meticulosidad. No fueron años de comodidad: incidentes bélicos que surgieron durante su estancia en el virreinato, penosidades por una geografía montañosa que tuvo que ser escalada con no pocas contrariedades y ,además, las desavenencias entre el grupo de científicos... 

Las mediciones en Quito y en Laponia, efectivamente corroboraron, que la tierra se encontraba achatada por los polos. La aportación más destacada de Jorge Juan fue la precisión de las medidas tomadas para calcular el arco de meridiano.

Su trabajo científico fue publicado en Madrid, en 1748 con el título Observaciones astronómicas, y Physicas, hechas de orden de S. M. en los reynos del Perú.

Una segunda contribución a España, de suma importancia y mayor intrepidez, fue la labor de inteligencia desarrollada en Inglaterra.  

Para adquirir la tecnología naval de otras potencias europeas, el marqués de la Ensenada comisiona a distintos oficiales para conocer avances técnicos y militares que pudieran comprometer el potencial de la Real Armada. Era, por otro lado, una práctica frecuente entre todos los paises. No fue, en este aspecto España, ni más diligente ni menos indolente que el resto de las potencias.. 

Mediante una instrucción reservada de 1749, Ensenada comisiona a Jorge Juan autorizando su viaje a Londres. Es acompañado por dos oficiales de su confianza, Jorge Solano y Pedro de Mora. 

Instalados en la capital británica crean una red de inteligencia con el sacerdote católico Lynch y el capitán mercante Richard Morris. Su introducción en el ambiente científico e intelectual de Londres fue fácil para el alicantino dada su preparación técnica. Fueadmitido como fellow o colega en la Royal Society.

Se hacen con los planos e informes de toda la construcción naval de guerra, tanto la desarrollada en el astillero de Woolwich, sur de Londres, como en el astillero de Portsmouth, en Hampshire. Adquieren instrumentos avanzados, entre otros, un cronómetro para medir la longitud desde el propio navío. 

Descubiertos 18 meses después logran huir del país. Pudieron captar a diferentes técnicos en la construcción de navíos que llegados a España fueron contratados por laReal Armada, desde maestros de ribera hasta oficialesconstructores.

Como tercera contribución, Jorge Juan recibe el encargo del rey de modernizar las naves y fábricas, aplicando tanto las nuevas técnicas descubiertas como las de elaboración propia, fruto de sus estudios. De este modo se construyenlos navíos más avanzados que jamás se tuvo.

En la Junta de constructores de 1752, presidida por Jorge Juan, se redactaron los reglamentos para navíos y fragatas tratando aspectos técnicos como la tablonería de roble, piezas de cedro, haya u olmo; hierros, anclas y otros elementos.

Con Jorge Juan y sus aportaciones científicas en física,matemáticas, cálculo diferencial e integral logran construir 44 navíos de combate de entre 70 y 94 cañones. Gonzalo Anes cuantifica la cantidad de 43 navíos de línea y 11 fragatas.

Esta serie de navíos supuso una renovación completa de la náutica de guerra española que incorporó los últimosdescubrimientos científicos sobre   mecánica, hidrostática y fluido aerodinámico. 

La intervención de Jorge Juan en esta etapa constructiva del s. XVIII se extiende desde 1750 a 1765, y es conocida como «sistema de construcción a la inglesa».

Como características de los navíos pueden destacarse: 

a) Aumenta la manga de los navíos dándoles un mejor diseño para disminuir su resistencia al agua e incrementar su estabilidad.

b) Racionaliza el empleo de la madera quitando la superflua de la obra muerta e introduciendo, de nuevo, el empernado de hierro o cobre.

c) Prescinde de las cabillas de hierro.

d) Incrementa la solidez del encastre provocando que los vasos del navío aumentensu resistencia frente a posibles quebrantos.

De todos los navíos que se construyeron merece destacarse la serie Doce apóstoles o Apostólicos, que son los siguientes:

• NSMC Oriente ( 1753), 74 cañones.
• NSMC Aquilón (1754), advocación de S. Dámaso, de 68 cañones.
• NSMC Magnánimo (1754), advocación de S. Justo y S. Pastor, de 74 cañones.
• NSMC Héctor (1755), advocación de S. Bernardo, de 69 cañones.
• NSMC Brillante (1754), advocación de S. Dionisio, de 74 cañones.
• NSMC Eolo (1753), advocación de S. Juan de Dios, 68 cañones.
• NSMC Neptuno (1754), advocación de S. Justo, de 68 cañones.
• NSMC Gallardo (1754), advocación de S Juan de Sahagún, de 74 cañones.
• NSMC Guerrero (1755) , advocación de S. Raimundo, de 74 cañones.
• NSMC Vencedor (1755), advocación de San Julián, de 74 cañones.
• NSMC Glorioso (1755), advocación de San Francisco Javier, de 74 cañones.
• NSMC Soberano (1755).

Por último, una cuarta aportación de Jorge Juan se produce con su nombramientocomo director de la Real Academia de Guardias Marinas de Cádiz. En este destino actualizó los planes de estudios potenciando las matemáticas y la física, incrementó el número de alumnos prefiriéndose a aquellos con mayor talento científico.

Funda en Cádiz en 1753, con su amigo Luis Godin, científico francés de la expedición geodésica al Perú, el Real Observatorio Astronómico de España, hoy conocido como Real Instituto y Observatorio de la Armada.

Muchos más servicios ofreció a España, el ultimo, cuando a petición del rey fue nombrado director del Real Seminario de Nobles de Madrid en 1770. Este centro fue inaugurado en 1725 por Felipe V. Institución educativa para la formación de militares y altos cargos de la Administración, logró imprimirle dinamismo y altas cotas de calidaddocente, recobrando su protagonismo, muy menguado, en el espacio educativo de la Corte y de España.

En conclusión, contemplamos a un hombre singular, de especiales talentos, que merece sobradamente este breve relato en reconocimiento a sus muchos servicios para situar a España en el lugar que por historia le corresponde.  Una generosidad sacrificada propia, solamente, de los grandes hombres cuyas  aportaciones hablan siempre a través del tiempo, invitando a seguirles como modelo de vida.