La dirección del PP da instrucciones a Sáenz de Santamaría y García Escudero: “Menos broncas porque el PSOE aprovecha para desacreditarnos como alternativa”
“Cuidado con José Bono y Javier Rojo”. Después de las últimas dos sesiones de control al Gobierno en el Congreso y en el Senado, Génova ha dado orden a sus portavoces de “rebajar el tono” para evitar una campaña contra el PP protagonizada por los propios presidentes de las cámaras.
Según ha sabido El Confidencial Digital, la dirección del PP ha observado una nueva estrategia del Gobierno para atacar a los diputados del PP y de paso ‘tapar’ los temas más delicados, como los ERE en Andalucía, el crecimiento del número de parados o el ‘caso Faisán’. Para ello, han cobrado especial importancia las figuras de José Bono y Javier Rojo.
Voces autorizadas de Génova afirman que “en dos semanas hemos pasado del tiempo extra a Elena Salgado y que Bono nos acusara de insultarle a la lección de moral ofrecida por Rojo a nuestro grupo”. En la dirección del PP ha indignado el comportamiento de ambos en las últimas sesiones de control al Gobierno, más tensas de lo habitual:
--El pasado 13 de abril, después de una pregunta de Cristóbal Montoro a Elena Salgado en el Congreso, José Bono decidió conceder seis segundos más a la ministra para su respuesta, cuyo tiempo había finalizado después de unos murmullos en la cámara. La decisión de presidencia provocó nuevas protestas en la ‘bancada’ popular’, aprovechadas por el propio Bono para acusar a diputados del PP de haberle insultado.
--Dos miércoles después, el día 27, fue Javier Rojo el que aprovechó los comentarios surgidos por una pregunta a Manuel Chaves sobre los ERE de Andalucía para enviar una dura reprimenda a los senadores por no mantenerse en silencio, tachando de “lamentable” su actitud y vaticinando “un bochorno de todos los presentes cuando se vean en televisión”.
Para la dirección del PP, “tanto Bono como Rojo consiguieron que lo único destacado por los medios fuese su intervención y no las preguntas al Gobierno”. Al día siguiente de ambas sesiones de control, “los telediarios y los periódicos se olvidaron de la economía o los ERE para destacar solamente los discursos de ambos”.
Se trata de una vieja técnica del PSOE
La actitud “más que hostil” de los presidentes de las cámaras no es nueva para los ‘populares’ porque “es una vieja técnica del parlamentarismo que ya empleó el PSOE en etapas anteriores. En su día, fue muy explotada por Felipe González.
Las fuentes de Génova consultadas por ECD explican que “el objetivo del Gobierno es desacreditar a los parlamentarios. Se quiere dar la impresión de que no existe una alternativa real al actual Ejecutivo y por eso Bono y Rojo van a atacarnos. Su objetivo es que todas las sesiones de control que quedan hasta el final de legislatura sean igual de crispantes”.
El deber de Soraya Sáenz de Santamaría y Pío García Escudero será “calmar los ánimos dentro del grupo para para no entrar en la provocación, evitar la polémica y que nuestras preguntas al Gobierno no puedan ser silenciadas por los presidentes de las cámaras”.
