El acuerdo PSOE-Sumar para limitar los vuelos no afecta a ninguna ruta actual
Los aeropuertos de Madrid, Barcelona y Málaga están exentos por enlazar con destinos internacionales. Para el resto de trayectos, no hay alternativas en tren de menos de dos hora y media
En el acto donde se dio a conocer el acuerdo de investidura entre su partido y el PSOE, la líder de Sumar anticipó que una de las 230 medidas era la supresión de "los vuelos cortos inferiores a dos horas y media cuando no haya alternativa al tren”. Esta semana, cuatro meses después del anuncio, ambas formaciones han acordado una enmienda transaccional sobre este asunto en la Comisión de Transición Ecológica del Congreso de los Diputados, a partir de una proposición no de ley de Sumar.
La propuesta a la que aludía Yolanda Díaz consiste, en realidad, en la reducción de aquellos vuelos domésticos que puedan sustituirse por trayectos en tren de menos de dos horas y media de duración, "salvo en casos de conexión con aeropuertos-hub que enlacen con rutas internacionales".
Este matiz resulta significativo. El planteamiento inicial afectaría fundamentalmente a los vuelos con origen o destino en Madrid y Barcelona, ciudades cuyos aeropuertos abarcan en torno al 40 % de los movimientos nacionales y disponen asimismo de un amplio servicio ferroviario de alta velocidad.
Sin embargo, la medida que han adoptado los socios de Gobierno resultaría inoperante al tener en cuenta la excepción que apunta a los llamados aeropuertos-hub, puntos de conexión estratégicos donde una miscelánea de pasajeros y mercancías enlaza con otros destinos, de carácter internacional.
Madrid, Barcelona y Málaga
Según los últimos datos del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, España tiene conexiones con 152 países y un total de 1184 destinos globales. Casi un tercio de los aeropuertos españoles son internacionales, entendiendo como tal aquellos que cuentan con instalaciones aduaneras y controles fronterizos, lo que permite realizar vuelos a países extranjeros. Algunos de ellos son, además, hubs internacionales.
Junto con el Adolfo Suárez Madrid–Barajas y el Josep Tarradellas Barcelona–El Prat, fuentes del sector de la aviación apuntan a que también el aeropuerto de Málaga–Costa del Sol constituye un nodo de conexiones entre rutas aéreas internacionales e intercontinentales. Así las cosas, sin tener en cuenta los vuelos con origen o destino en alguna de estas tres ciudades, no existen rutas aéreas que puedan ser sustituidas por un trayecto en tren inferior a 150 minutos.
Almería-Sevilla
Prescindiendo de Madrid, Barcelona y Málaga, el resto de conexiones aéreas comunica ciudades periféricas relativamente alejadas entre sí. De hecho, la única ruta dentro de la misma comunidad autónoma es Almería-Sevilla, operada por Iberia, con una distancia entre ambos municipios de más de 300 kilómetros.
Tampoco en este caso resultaría viable una conexión ferroviaria: la línea de alta velocidad no llega a Almería, donde las infraestructuras necesarias aún están en fase de construcción. La alternativa serían los trenes Avant y de Media Distancia. En concreto, un recorrido combinado con un trayecto en un tren MD de Almería a Granada y un segundo trayecto en Avant de la ciudad nazarí a Sevilla.
Los dos recorridos diarios en esta dirección tardan, respectivamente, 5 horas y 26 minutos y 5 horas y 44 minutos. En sentido contrario, Sevilla-Almería, hay tres trayectos de entre cinco y seis horas, de manera que tampoco concurrirían las condiciones para suprimir el vuelo entre ambas ciudades.
AVE a Sevilla
Descartada la conexión con Almería, las rutas aéreas peninsulares de menor distancia son las de Sevilla con Alicante o con Valencia, ambas operadas por Ryanair. Con una distancia en línea recta de unos 500 kilómetros, podrían ser potencialmente reemplazadas por traslados en trenes AVE, si existiesen trayectos de menos de dos horas y media. Una vez más, no es el caso.
El diseño radial de la red ferroviaria española conlleva que las conexiones de alta velocidad confluyan en la capital. Así, eludiendo la afirmación de la geometría euclidiana según la cual la distancia más corta entre dos puntos es una línea recta, las líneas de alta velocidad que enlazan Sevilla con estas dos ciudades pasan por el centro de la península. De este modo, los traslados más breves son Alicante-Sevilla, con 6 horas y 13 minutos de duración (o 6 horas y 27 minutos en sentido contrario) o Valencia-Sevilla, con un transcurso de 4 horas y 23 minutos (4 horas y 26 minutos en dirección contraria).
