Policías nacionales de Cataluña, contra la equiparación salarial
Consideran injusto cobrar lo mismo que otros agentes del resto de España dadas las características especiales del trabajo en esta comunidad
El Ministerio del Interior y los sindicatos y asociaciones profesionales de la Policía Nacional y la Guardia Civil han alcanzado un preacuerdo, que será votado por los agentes, para alcanzar la “equiparación salarial” con los Mossos d’Esquadra y en general los agentes autonómicos. Sin embargo, en la propia Policía Nacional parte de los agentes defienden diferentes salarios dentro del mismo cuerpo.
Tras meses de negociaciones, de pulso sobre las cifras, y de que las asociaciones de agentes se levantaran de la mesa indignados por las propuestas del secretario de Estado de Seguridad, Interior y agrupaciones de Policía y Guardia Civil han alcanzado un preacuerdo: preacuerdo, porque las asociaciones lo van a someter a votación de sus afiliados antes de firmar o no lo ofrecido por el ministerio.
Pero, en principio, con 1.100 millones de euros en tres años (que incluye 300 millones de subida general de la función pública) se alcanzaría esa equiparación salarial con los Mossos.
Todos los sindicatos de la Policía Nacional respaldan esta idea de la equiparación salarial. Sin embargo, El Confidencial Digital ha podido saber que policías de Cataluña no están del todo de acuerdo con el concepto de equiparación salarial: sobre todo, porque consideran que ellos tendrían que recibir un mayor “complemento de territorialidad”.
En el País Vasco y Navarra, 600 euros más
Fuentes de la Confederación Española de Policía (CEP) en Cataluña explican a ECD que a las puertas del pasado verano, coincidiendo con el conflicto que hubo con los vigilantes privados del aeropuerto de El Prat y que obligó a movilizar a la Policía Nacional, ellos y otros sindicatos como el Sindicato Profesional de Policía reclamaron a Interior que aprobara un complemento de territorialidad mucho mayor para Cataluña.
Actualmente son los agentes destinados en el País Vasco y Navarra quienes reciben un complemento de mayor cuantía, por encima de los 600 euros. Es una herencia del llamado Plan ZEN (Zona Especial Norte), que puso en marcha el ministro Juan José Rosón (de UCD) en la Transición, cuando los periódicos atentados de ETA contra las Fuerzas de Seguridad ahuyentaba a los policías nacionales y guardias civil.
Ese complemento se ha mantenido: ya no hay atentados de ETA, pero aún en muchas zonas del País Vasco y Navarra se mantiene una presión social, una hostilidad hacia los agentes.
En otras zonas existen otros complementos mucho menores: Baleares, Canarias, Ceuta y Melilla por la lejanía a la Península, y también muy reducido en Madrid, Barcelona (unos 50 euros en 2015) y resto de Cataluña (menos de 40 euros).
La carestía de la vida
Lo que CEP, SPP y otros sindicatos han planteado al Ministerio del Interior y al Delegación del Gobierno en Cataluña es que se debería establecer un complemento de territorialidad mucho mayor en esta comunidad autónoma, que en varios informes han calculado en torno a los 350 ó 400 euros al mes.
Son varias las razones por las que ven necesario este complemento a los policías nacionales que viven en Cataluña. Por un lado, la mayor carestía de la vida en Barcelona y en general en Cataluña respecto a otras zonas: “Muchos prefieren irse a Teruel, o a Castellón, porque la vida es más barata. Hay agentes que trabajan en fin de semana en El Prat y que viven en La Coruña, les compensa venir en avión cada semana a trabajar aquí”, explica una fuente policial.
A eso se una la creciente presión de los independentistas contra los miembros de las Fuerzas de Seguridad del Estado en Cataluña. Los que fueron de otras partes de España durante los últimos meses de 2017 sufrieron acoso en hoteles, pero se volvieron a sus lugares de origen. El problema mayor lo tenían los que viven en Cataluña, y que en algunos casos han visto cómo sus hijos recibían críticas y reproches en el colegio por ser sus padres policías o guardias civiles.
Las plazas no se cubren en Cataluña
Todo esto provoca unos resultados muy concretos, explican agentes de Cataluña a ECD. Año tras año, las convocatorias de plazas en esta comunidad autónoma no se cubren, a diferencia de otras zonas. “Por algo será”, apuntillan, añadiendo que es porque no es un destino apetecible para los agentes.
Como consecuencia, la rotación en Cataluña de agentes de la Policía Nacional es muy elevada. Llegan alumnos recién salidos de la academia, enviados por la Dirección General. Durante los dos primeros años no pueden pedir cambio de destino, pero en cuanto pueden, muchos piden el traslado a otras regiones de España, por los dos motivos, presión y carestía de la vida.
“Así nos descapitalizamos: se forma gente, pero se va a los pocos años, viene gente nueva...”, lamentan veteranos de la Policía Nacional en Cataluña, que señalan la necesidad de ese complemento de territorialidad más elevado en esta comunidad para conseguir que los agentes “arraiguen” y no se trasladen tan pronto.
El caso es que el pasado verano los sindicatos policiales en Cataluña comenzaron a mover este asunto. Sin embargo, llegó la “Operación Copérnico”, las polémicas con los Mossos y dio comienzo la campaña por la equiparación salarial con los policías autonómicas: de esta forma, la exigencia de una subida de ese complemento a los policías nacionales en Cataluña quedó apartada de la prioridad máxima de los sindicatos a nivel nacional.
Sin embargo, fuentes consultadas por ECD aseguran que una vez que la equiparación -de la que, obviamente, los agentes de Cataluña también se benefician- quede aprobada y se normalice la situación, volverán a reclamar a Interior con fuerza que tenga en cuenta las condiciones especiales en las que prestan servicio en esta comunidad autónoma.
