Moratinos nombró personalmente a Juan Ignacio Álvarez-Gortari, el cónsul cesado en el ‘consulado maldito’ de Orán
Miguel Ángel Moratinos cesó en fechas recientes al cónsul de España en la ciudad argelina de Orán, Juan Ignacio Álvarez-Gortari. El cónsul había sido nombrado por el propio Moratinos para que terminaran los problemas en un destino que empieza a conocerse como “el consulado maldito”.
Moratinos había designado personalmente a Álvarez-Gortari, reservando para el consulado de Orán el ‘asterisco’ con que se destacan los nombramientos que, por su importancia política o de cualquier otra índole, el ministro se guarda para sí. El cese del cónsul general vino precedido de dos inspecciones y una llamada a consultas.
El consulado de Orán mereció la atención de Moratinos tras los problemas habidos en 2006 y 2007 entre el personal diplomático allí destacado y miembros del CNI adscritos al consulado y apoyados por el entonces director de la inteligencia español, Alberto Saiz. Fuentes diplomáticas consultadas por El Confidencial Digital han llegado a asegurar que el Ministerio de Exteriores encubrió comportamientos irregulares por parte de los aludidos miembros del CNI.
Así, el de Orán ha venido ganándose el apodo de “consulado maldito”, pues ya en 2003 se originó un escándalo a propósito de la supuesta concesión irregular de visados por parte del agregado comercial español.
Ahora que Moratinos ha cesado al cónsul nombrado por él mismo, Álvarez-Gortari ha hecho circular una carta en la que acusa de irregularidades en la concesión de visados a la jefa de negociado del consulado, Ana Hernández, quien, según las fuentes consultadas por ECD, se ha visto muy afectada por dicha misiva. Álvarez-Gortari, por su parte, ha acusado al sindicato UGT de estar detrás de su cese. El cónsul cesado ya había acusado de corrupción a compañeros suyos en el consulado de Rosario, Argentina.
El consulado de Orán es uno de los consulados problemáticos que tiene Exteriores –junto a Shanghai y La Habana y otros del Magreb - por ser Argelia país de origen y de tránsito de inmigrantes y haberse reforzado las medidas de control tras los atentados del 11-M.
