Psicosis por los pinchazos en las zonas rurales: faltan agentes para investigar las denuncias

Tras el fin de las restricciones por la pandemia, el sector de la noche tiene un nuevo motivo de preocupación: las nuevas agresiones que se están produciendo en discotecas y fiestas nocturnas de toda España. Se trata de los conocidos pinchazos con objetos punzantes, para intentar inocular sustancias químicas que provoquen la pérdida de sentido o la sumisión química.

Por el momento, el fenómeno se ha denunciado en puntos de toda España, pero muchas de estas denuncias están siendo desmentidas. No obstante, se está sembrando el pánico en la ciudadanía y la necesidad de recurrir a las fuerzas policiales.

Este temor se ha trasladado también a las zonas rurales. En verano tienen lugar muchas fiestas y celebraciones populares que se organizan en estas fechas. Muchos jóvenes vuelven a repoblar durante unos meses la denominada ‘España vaciada’ para pasar sus vacaciones.

Pues bien. Algunos ayuntamientos de pueblos localizados en Castilla La Mancha, Castilla y León y Extremadura han confirmado a ECD su “preocupación” por este fenómeno de los pinchazos, porque no están pudiendo hacer frente a las denuncias. “Necesitamos más agentes de seguridad, explican, por si crecen este tipo de agresiones”.

Por el momento, no se ha podido confirmar ninguna agresión de este tipo en las zonas rurales, pero según explican “ha habido llamadas que no hemos podido atender porque nuestros agentes estaban atendiendo otras denuncias”.

La falta de Guardia Civiles en las zonas rurales se está agravando con el paso del tiempo. Fuentes del cuerpo admiten que “cada vez hay menos personal, lo que está provocando que los agentes podamos cubrir menos turnos”.

Desde los ayuntamientos y comunidades añaden a además que “los incendios han provocado una falta de coordinación”, ya que el despliegue principal se ha centrado en el monte para paliar los efectos de las llamas, coordinar a los efectivos y atender a las familias afectadas.

Coordinación centros de salud y Guardia Civil

En estos momentos se debería estar aplicando un plan estratégico diseñado para zonas de las dos Castillas con pocos habitantes por kilómetro cuadrado. Los centros de salud deben atender a los pacientes, mientras se comunican con la Guardia Civil para preparar la denuncia.

Confidencial Digital ha preguntado a varios ayuntamientos sobre este tipo de actuaciones, y admiten que este plan no es viable en algunos pueblos porque los ambulatorios no están abiertos las 24 horas. Además, las agresiones se suelen producir de noche y, en esos casos, los afectados se tienen que trasladar al hospital de la ciudad más cercana.

La Guardia Civil pide “mantener la calma”

Desde la Guardia Civil se explica que las llamadas que reciben, principalmente los fines de semana, proceden de fiestas de pueblos por incidentes relacionados con esos eventos. Cuando se pregunta por el suceso y los síntomas, por el momento “nada tiene que ver con los pinchazos”. Piden a la ciudadanía que se informe y, sobre todo, que “mantengan la calma”.

Por último, se señala que “algunas llamadas son bromas por parte de críos”, y muestran su pesar por este tipo de comportamientos. Mientras corroboran la veracidad de estas denuncias no pueden atender casos reales.