El misterioso dossier sobre Alberto Núñez Feijóo
Me tiene perplejo Alberto Núñez Feijóo. De todo el guirigay que se ha montado estos días es probablemente la ecuación más extraña de todas. ¿A qué viene este entusiasmo repentino por presidir el PP? ¿Cómo ha sido tan fácil convencerlo ahora de este paso adelante por el bien del partido? ¿Qué ha cambiado respecto a junio de 2018?
Aquel año, el presidente de la Xunta y del PPdeG anunció que no optaría a liderar el partido tras la marcha de Mariano Rajoy y reafirmó su compromiso con Galicia hasta 2020, cuando finalizaba la legislatura. “Sin haber completado mi compromiso no puedo fallar a los gallegos, porque sería fallarme a mí mismo”, declaró con la voz quebrada y sin poder reprimir la emoción.
Todo el mundo ‘popular’ se quedó perplejo… y decepcionado. Porque María Dolores de Cospedal y el propio Pablo Casado habían acordado dejarle a él los mandos del partido si se presentaba. Se comprometieron a no competir con él. Era la ‘tercera vía’, el hombre de consenso que podía recomponer un partido hecho unos zorros tras el desastre de Rajoy. Tenía vía libre… pero dijo que no.
Revalidó su mayoría absoluta en Galicia y ahora, que vuelve a estar en el ecuador de su legislatura (a dos años de los próximos comicios regionales), se ofrece a ser el pegamento que recomponga el jarrón destrozado en mil pedazos. ¿Qué ha cambiado para que ahora Feijóo sí pueda dejar en la estacada a los gallegos y venirse a Madrid?
Hay que recordar que, por aquel entonces, se habló de un dossier, un informe confidencial con noticias o fotografías comprometedoras que amenazaban su futuro político. Hace tiempo que trascendió alguna imagen de Feijóo navegando por la ría de Arousa en el yate del narcotraficante Marcial Dorado. Pero no hubo más.
El dichoso dossier, que tanto recuerda estos días a la trama de espionaje sobre el hermano de Ayuso, habría sido esgrimido por alguien que quería impedir su llegada a Madrid. Porque jamás se usó en la campaña de Galicia y Feijóo pudo revalidar en 2020, como se ha dicho, la mayoría absoluta. Extraño, ¿verdad? Se habló de si Soraya Sáenz de Santamaría, que dirigió el CNI durante su etapa como vicepresidenta del Gobierno Rajoy, habría obtenido datos comprometedores sobre el gallego y le cerró el paso… para perder después contra Casado el sprint final.
¿Existía el dossier? Si no es así, ¿por qué Feijóo no aceptó el reto? ¿Dónde estarán ahora esos documentos? ¿Ha caducado esa información o Feijóo considera que no se usará ahora contra él? ¿Soraya era la ‘equis’? ¿Qué ha cambiado para que el presidente gallego se postule ahora con tanta rapidez?
Son preguntas para las que no tengo respuestas, pero no se me van de la cabeza estos días.
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