Pedro Sánchez necesita tiempo
Empiezan a surgir voces –el otro día se lo leí a Carlos Herrera, por ejemplo- que dudan de que la gran coalición PSOE-Unidas Podemos pueda apurar toda la legislatura como pretende su líder Pedro Sánchez. Parece herida de muerte y un descalabro en mayo podría ser la puntilla que desatara las hostilidades.
Sabemos que el inquilino de La Moncloa se va a resistir como si no hubiera un mañana. Porque, efectivamente, ese será su caso: todo lo que no sea alejar la convocatoria electoral de las generales lo más posible del presente, puede suponer su muerte política prematura.
Necesita tiempo para que los ciudadanos olviden muchas cosas: los indultos, la reforma del Código Penal para eliminar el delito de sedición y rebajar el de malversación, el escandaloso patinazo con la ley del sólo sí es sí, la humillación del vecino Mohamed VI… Y necesita que cuaje ese proyecto todavía efímero llamado Sumar.
Pedro Sánchez, por tanto, necesita tiempo desesperadamente. También para que mejore la economía española. Y para ganar imagen de estadista durante la presidencia española de la Unión Europea, que nos corresponde a partir del verano y hasta final de año. De ahí que, insisto, en el PSOE no quieran oír hablar de generales antes de diciembre próximo.
Sin embargo, el 28 de mayo puede haber un cataclismo de aquí te espero. Los datos que maneja el PP son, en estos momentos, muy optimistas. Tanto, que Feijóo ha tenido que calmar los ánimos: nada de euforia, nada de creer que el partido está resuelto; a trabajar sin descanso y con humildad, que todavía pueden pasar muchas cosas de aquí a mayo. Pero lo cierto es que el castañazo de la izquierda en las urnas provocaría un seísmo difícil de prever en estos momentos.
En caso de clamorosa derrota, el sprint hasta diciembre se le puede hacer muy largo al PSOE, con media coalición buscando cobijo para el futuro, ajustando cuentas, pasando facturas o tirando por la calle de en medio. Ahora, al presidente le ha resultado más sencillo calmar los ánimos: está en juego mucho poder local. Pero habrá que ver qué sucede en junio.
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