¿Esto es España?
Dos guardias civiles son asesinados en Barbate, atacados por una lancha de narcotraficantes, y se escucha a la gente jalear a los asesinos y animarles a hundirlos, con gritos de “dales fuerte”, “húndelos”, “maricones”...
Resulta que el ministerio del Interior se mostró consternado por el “fallecimiento” y la agencia Efe habló de “accidente”.
Los agentes iban embarcados en una Zodiac porque las patrulleras están averiadas.
Dieciséis meses antes, Marlaska desmanteló la unidad OCOn Sur, que combatía el narcotráfico en el Campo de Gibraltar y había logrado la mayoría de las detenciones e incautaciones. Hace unos días, el ministro sostenía que la situación en la zona estaba controlada, mientras la fiscal antidroga afirma hoy que las narcolanchas campan a su aire.
Y Marlaska sigue siendo ministro.
La Gala de los Goya no hizo mención alguna a la muerte de los guardias civiles. Ni tampoco el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que en otra ocasión no tuvo problemas en dar el pésame por la muerte de un etarra.
Un sujeto, marroquí, se pasea por el metro de Barcelona golpeando a mujeres, derribando violentamente a una de ellas. Las imágenes son impresionantes.
Lo detienen los Mossos y queda en libertad sin más. Y ni media palabra de las feministas.
Siguiendo en Cataluña. A propósito del intento de aprobar una amnistía a los que trataron de romper el Estado, el comentario de un experto: "Si dos personas queman un coche sólo se amnistiará al independentista".
Lo ha dicho Agustín Ruiz Robledo, que compareció en el Senado ante la Comisión de Venecia, y el martes presenta 'La amnistía en España: Constitución y Estado de derecho' un libro colectivo que ha dirigido junto a Enrique Gimbernat y Manuel Aragón.
Allí, en Cataluña un partido político legal, Junts, con representación en el Parlamento español, resulta que tiene relaciones con la dictadura de Putin. Y que es uno de los ‘socios’ del Gobierno. La seguridad nacional en entredicho. Lo mismo que la europea, porque ha sido vinculado a espías que trabajan contra la UE.
El sector agrario está en armas, miles de agricultores han salido a las carreteras porque no pueden vivir, y alguno líderes sindicales, como Unai Sordo, de Comisiones Obreras, dicen que son “manifestaciones empresariales”.
Le han respondido que el 90 por ciento de las personas que se están manifestando tienen parcelas pequeñas.
En otro lugar de España, dos niños adoptados, de origen ruso, de 13 y 15 años, matan a su madre adoptiva en la cocina, la desnudan, la llevan al coche, la maniatan, le ponen una bolsa de plástico en la cabeza… El pequeño es inimputable, el mayor ha pasado a un centro de internamiento de menores.
Y, mientras, TVE llevará a Eurovisión una canción titulada “Zorra”. Si esa es la imagen que España quiere dar... Al presidente Sánchez le ha gustado, y se ha ganado la crítica del feminismo, muy enfadado, que le ha respondido: “Nosotras no somos zorras”.
La delegada de Igualdad, Diversidad e Inclusión de RTVE, Montserrat Boix, ha presentado su dimisión, afirmando que eso no es empoderamiento ni feminismo. "Pido perdón a las víctimas de violencia de género", ha dicho.
La BBC ha acusado a Zorra de ser una canción "anti-mujeres y ha criticado a Pedro Sánchez por defenderla.
Y así, una tras otra.
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