Feijóo habla inglés con acento de Oxford
Es conocido que el presidente del Partido Popular recibe clases de inglés, con el fin de mejorar una lengua que todavía no domina.
Él mismo ha reconocido públicamente que “tiene problemas” con ese idioma, por ejemplo para participar en reuniones internacionales.
Por eso mismo, me hice cruces cuando pude ver en Internet imágenes de una intervención de Feijóo en la que utilizaba la lengua de Shakespeare de una manera magistral, impresionante en la dicción, incluso con acento de Oxford. Y retuiteé esas escenas, asombrado.
Muy poco después me enteré de que se trataba de una recreación, un truco, una pieza falsa, articulada mediante Inteligencia Artificial. Y que el experimento había sido probado también con personajes como Belén Esteban, Jorge Javier Vázquez, el Fary y otros, que igualmente se expresaban en inglés con acento de Oxford.
La inteligencia artificial permite, con una herramienta sencilla, traducir a otra lengua el contenido y el tono de voz de cualquier persona en un vídeo, y, como pude apreciar en el caso de Feijóo, el resultado es muy convincente.
El lunes se conoció la noticia de que decenas de niñas de Almendralejo han visto que se publicaban en la red fotos suyas como si estuvieran desnudas, y que la Policía había identificado a varios menores, acusados de posibles autores de las imágenes modificadas.
La Inteligencia Artificial ha venido para quedarse, sin duda. Pero, dadas sus capacidades (y eso que solo estamos en los comienzos) y la facilidad de uso, los riesgos que puede provocar me parecen incalculables.
Por poner un ejemplo sencillo. Cualquier personaje famoso, un presidente del Gobierno, el líder de un partido, es susceptible de verse modificado y aparecer en las redes sociales diciendo cualquier barbaridad, a favor, en contra… Por supuesto, al final podrá aclararse lo sucedido, pero entre tanto pueden producirse reacciones inesperadas, respuestas irreflexivas que luego habría que corregir…
Por no hablar de los ‘robos’ de imágenes y de tonos de voz para ser utilizados sin permiso de sus dueños. Stephen Fry, actor narrador de los audiolibros de Harry Potter, ha denunciado que una IA se ha apropiado de su voz para un documental en el que no ha participado.
Tengo que decir que me encantan los avances, las novedades, y que la Inteligencia Artificial ofrece muchas esperanzas.
Pero, a la vez, hay que reconocer que hemos entrado en el reino de la inseguridad, y eso resulta inquietante. A partir de ahora, cabe dudar de toda imagen, declaración, escena, incidente… por el riesgo de que se trate de un produzco falsificado, fabricado mediante IA. Incluyendo sonidos, escenas, textos escritos, documentos… Inseguridad o incluso caos.
Se echa de menos ya una regulación precisa, que aborde estas cuestiones, a pesar de las dificultades que plantea algo tan novedoso y hasta desconocido, que, como digo, solo acaba de empezar y no se sabe dónde puede terminar.
Una vez más, las normas van muy por detrás de la realidad, pero suele ser inevitable.
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