José Apezarena

Las mascarillas anti Covid han llegado para quedarse

La existencia de vacunas contra el Covid-19 se ha convertido en un éxito científico y político, por la rapidez con que se han llevado a cabo la investigación y culminado las pruebas, y por la puesta en marcha de su dispensación.

El hecho de que en diciembre estén ya administrándose de manera general en países como Reino Unido y Estados Unidos constituye una magnífica noticia, frente a las previsiones iniciales que las situaban para muy entrado el año 2021.

A la vez, las noticias sobre llegada de dosis abundantes a Europa, y también a España, han provocado en la población una sensación de alivio, y hasta de seguridad y tranquilidad que, sin embargo, preocupa a los médicos, porque tal convencimiento puede ser origen de comportamientos altamente peligrosos.

Expertos en enfermedades infecciosas explican que las vacunas producidas por Pfizer y Moderna son distintas a las producidas hasta ahora, como son las de la hepatitis B o el tétanos. Por primera vez utilizan plataformas de ARNm, una forma de terapia génica.

Las vacunas utilizadas hasta ahora “impedían”, por así decirlo, el contagio, contraer la infección. Por el contrario, los remedios de Pfizer y Moderna en realidad no está claro que bloqueen el contagio por el coronavirus del Covid-19.

Lo que parece que consiguen esas vacunas es que no pase de la boca, que se quede ahí, y no penetre el tracto respiratorio inferior y produzca formas graves, con neumonía. Pero el paciente vacunado puede seguir padeciendo la infección y, quizás, ser transmisor.

Así que, a pesar de habérsele dispensado la vacuna, seguirá debiendo cumplir todas las medidas anti-Covid vigentes hasta el momento. Es decir, uso de mascarilla, distancia de seguridad, evitar aglomeraciones y lugares cerrados, lavarse las manos, ventilar habitaciones, etc.

Por otro lado, no hay información disponible sobre cuánto tiempo se mantiene la protección de la vacuna. De este modo, quizás se requerirán más de dos dosis para evitar reinfecciones. Tampoco está claro si estas vacunas serán eficaces frente a las diferentes variantes o mutantes que aparezcan del coronavirus del Covid-19.

En conclusión, parece que no nos vamos a librar de tener que llevar boca y narices tapados. Y eso durante bastante tiempo…

 

Así pues, la mala notica es que las mascarillas han llegado para quedarse.

editor@elconfidencialdigital.com

Más en Twitter

Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato