José Apezarena

El PNV se queda sin nueces

El portavoz del PNV en el Congreso de los Diputados, Aitor Esteban.
El portavoz del PNV en el Congreso de los Diputados, Aitor Esteban.

El portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, tiene fama, acreditada, de parlamentario bregado. Y, sin embargo, se le vio nervioso y embarazado en varios momentos durante el pleno de investidura de Núñez Feijóo. Como sin saber de qué y cómo defenderse.

Ocurrió que el candidato, el líder del PP, se mostró especialmente contundente con los nacionalistas vascos, entre otras cosas poniendo de manifiesto la contradicción que supone que vayan de la mano de EH Bildu, que son los principales rivales políticos en su territorio, quienes, como repitió Núñez Feijóo, electoralmente les están ‘comiendo la tostada”, como suele decirse

En más de una ocasión, Aitor Esteban subió a la tribuna visiblemente desencajado y como sin argumentos. Casi por vez primera desde que es diputado. Pero es que no le faltaban motivos.

Las encuestas pronostican una victoria de EH Bildu en las elecciones vascas del próximo año, superando por vez primera al PNV, que ve así peligrar el Gobierno Vasco a manos de su principal rival, la izquierda abertzale.

Ese panorama, y la posibilidad de que el próximo lehendakari sea Arnaldo Otegi, inquieta sobremanera a los dirigentes del partido que fundó Sabino Arana. No es para menos. El problema es que no saben cómo frenar la progresión de los herederos de ETA y su propio declive.

A ese respecto, viene a la memoria la figura de Xabier Arzalluz, histórico presidente del PNV, que, por cierto, como Aitor Esteban, fue también diputado en las Cortes de Madrid.

Arzalluz es autor de la famosa frase “Unos sacuden el árbol, pero sin romperlo, para que caigan las nueces, y otros las recogen para repartirlas”, pronunciada en 1990, en una reunión con la cúpula de Herri Batasuna.

Aludía así a un evidente reparto de papeles entre el PNV y Batasuna a la hora de la lucha por la independencia de Euskadi. Arzalluz no estaba condenando el pistolerismo de ETA, y hasta le parecía rentable para sus intereses.

Se puede afirmar que ETA hizo su trágico trabajo: ahí están las cifras de víctimas. Sin embargo, la independencia no ha llegado. Por el momento.

 

Pero, hoy por hoy, parece que el PNV se puede quedar sin sus nueces. Todo apunta a que ahora se las van a comer sus rivales batasunos.

Se comprende que Andoni Ortuzar, presidente del PVN, y el lehendakari, Urkullu, anden un poco nerviosos. Y, por supuesto, Aitor Esteban. Están en juego las nueces.

editor@elconfidencialdigital.es

En Twitter

Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato