Aguirre saca a Rato del armario y Camps saca a Calvo Sotelo, mientras en el PP hay quien no quiere entrar, por mucho que le empujen.

Las frases de Aguirre empiezan a ser un pobre bagaje para un partido en la oposición que aspira al poder. Lo que faltaba para completar las salidas de pata de banco de Manuel Fraga, los silencios más o menos medidos de Rajoy y las pretendidas ingeniosidades de Sáenz de Santamaría en sus encontronazos semanales con De la Vega, era la frase de Guerra Civil de Francisco Camps y es que poco hay en las alforjas del primer partido de la oposición.

Ahora lo que más llama la atención es lo que se cuece en Génova y cómo unos quieren retirar a otros para colocarse lo mejor posible de cara a las elecciones generales. Siguiendo con el armario de Esperanza Aguirre más de uno está intentando meter a empujones a algún dirigente y de los más encumbrados. Por mucho que se hable de encuestas favorables, lo cierto es que el Gobierno de Rodríguez Zapatero está cada vez más a gusto con la oposición –o lo que sea- que hacen los populares.

Entre los del PP cada vez es más alta y más clara la voz que pide un congreso extraordinario, y un congreso extraordinario -aunque no se haga en Valencia- no tiene más razón de ser que cambiar la cúpula y con la cúpula los candidatos. Lo que ocurre es que pasos laterales hay muchos pero pasos al frente pocos.

Una oposición medianamente normal se hubiera ‘forrado’ con la gestión que el Gobierno de Rodríguez Zapatero está haciendo del conflicto del ‘Alakrana’ incluido el acuerdo, ‘como sea’, con Somalia para extraditar a los piratas de Garzón -o lo que sean, ahora que la Audiencia Nacional vuelve a jugar al ‘yo no he sido’- cuando lo más que ha conseguido el Gobierno de España ha sido callar a las mujeres, hermanas e hijas de los pescadores. Pero es evidente que el Partido Popular tampoco sabe por dónde le viene el aire.

Cuando Moratinos y Chacón se las tienen tiesas y cuando al final no sabemos nada de nada de lo que está pasando y –un ejemplo- quién y con qué se paga al abogado defensor de los piratas, la oposición permanece muda.

Bien está que las familias hagan lo que creen mejor para su gente, pero ese no puede ni debe de ser el planteamiento de la oposición que, ha falta de gestiones eficaces, lo mínimo que puede exigir es información cierta y veraz.

Ahora parece que el presidente se hace cargo de las negociaciones pero tampoco podemos estar muy seguros de ello y nos callamos cuando un Gobierno dice que se está haciendo todo lo posible y que se está haciendo bien. Pues que Dios les oiga.

Por asociación de ideas uno se estremece ante la posibilidad de la vuelta de Arzallus a la vida pública, dicen que ahora en una especia de cosa que sería una plataforma batasuna a pesar de que legalmente también en Europa lo tienen todo perdido. Y, visto lo visto, uno se pregunta por qué puestos a tener estrés, sólo lo sufre De Juana Chaos y más ahora que todo se contagia.

La realidad es tozuda para todos los políticos menos para un tal José Luís Centellas que ha sido elegido preboste del Parido Comunista y que lo primero que dice es que los comunistas no tienen que pedir perdón por nada y lo dice el hombre –oportuno él- el día que en toda Europa se celebra el aniversario de la caída del muro de Berlín. Oportuno a más no poder.

 

Y es que de la inoportunidad a la estupidez hay poco trecho y algunos lo recorren a velocidad de vértigo. Por ejemplo los parlamentarios catalanes que montan un tinglado de traductores ante una visita de representantes hispanoamericanos. Y es que cada uno es muy libre de hacer el tonto incluso en el Parlamento de Cataluña.

El tonto y el ridículo. Dice Bibiana Aído que ‘somos el espejo en el que se miran nuestros vecinos europeos’. Como es andaluza igual no se ha enterado de la existencia de los espejos que deforman las imágenes, en la calle del Gato de Madrid y que inmortalizó Valle Inclán.

El tonto y el ridículo de los autodenominados parlamentarios católicos que se escandalizan porque la Iglesia dice lo que tiene que decir sobre la ley del aborto y además con todo el derecho a decirlo .

El tonto y el ridículo como los dirigentes del Real Madrid a los que sólo se les ocurre pedir perdón. Pues tras lo del Alcorcón, no es mucho.

Pero tal y como se está poniendo el patio a uno ya sólo se le ocurre rezar para que Bono nos coja confesados.

Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato