Tontos de género y tontos de manos

En las fiestas proliferan los tontos. En las de Navidad y Año Nuevo también. Pero eso parece normal en unos días en los que el que más y el que menos se 'pasa' un poquito con el rioja o con el cava.

No hay más que darse una vuelta por las calles y contemplar desde el que tira petardos y hasta se chamusca los dedos, al que gasta bromas con 'cacas' de plástico, pasando por el que se pasea tan ufano con unos cuernos de reno en la cabeza. Es aquello de que hay gente 'pa to'.

Y como no podía ser menos los políticos también participan de la juerga.

Ante la enorme tragedia e injusticia que supone la violencia contra las mujeres -con 60 muertes en lo que va de año y los cientos y cientos que no se atreven a denunciar malos tratos físicos o psíquicos- y a la vista del desastroso funcionamiento de los juzgados correspondientes, nuestros flamantes ministros y diputados se enzarzan en una discusión tonta sobre si la violencia es de género, es machista, es contra la mujer o es en el ámbito familiar. Son los tontos de género. Serían los mismos que para 'aliviar' las torturas de los presos políticos en ciertos países, ahora de luto y tan de moda, llevarían aspirinas a las cárceles.

El caso es que tras una nota de la ministra Ana Mato hablando de 'violencia en el entorno familiar' de ha montado 'la parda' y hasta Leire Pajín ha terciado en el asunto, para aclararnos que 'no toda la violencia se da dentro de la casa, sino que también hay violencia fuera'. Todo un hallazgo que habla por sí mismo de la susodicha ex ministra del ramo.

Lo dicho, por Navidad también proliferan los tontos de género.

Y los tontos de manos, que se quedan como estatuas de sal haciendo ostentación de manos caídas cuando de reconocer todo lo que ha hecho y hace el Rey se trata. Son los que hacen de la mala educación su bandería política y los que –es de suponer- presumen ante los adictos, luego, al llegar a la sede de su formación...'¿os habéis fijado cómo le he saludado? Ni inclinación de cabeza ni nada, como a uno más y, ¿ha salido en la tele que no he movido las manos cuando lo de los dos minutos de aplauso?'. Lo dicho tontos de manos.

Por haber hay hasta tontos de tijera. Ahora en vez de sastres, como toda la vida, se llaman 'directores de moda' Casi nada.

 
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