La semana va de metáforas: hay portavoces de ‘gatillo fácil’, transatlánticos en Valencia, ‘dificultades’ y hasta un ‘dream team’

Al final va ser que esto de los congresos -y el del Partido Socialista, a la chita callando, está a la vuelta de la esquina- desata las euforias y los entusiasmos, y como ahora hay consenso y todo hay que hacerlo de acuerdo con los otros y dialogando, pues a lo más que llegan los dirigentes –en plan blandorro- es a la metáfora.

Tras un calvario de dos meses llega Mariano Rajoy a tierras valencianas, y llega con su propio ‘dream team’. Está claro que la oposición de los que sacaron los pies del tiesto tras las elecciones era una oposición metafórica. Y ahí está Esperanza Aguirre afirmando que va a votar a Rajoy y Costa diciendo que apoyará a Rajoy y Ruíz Gallardón gritando ‘viva Rajoy’.

El vestuario es una piña, y claro que hay algunos que, como ha dicho Luis Aragonés de Sergio Ramos, ‘fuera del campo hacen cosas que no deben’ pero los del Partido Popular que fuera de Génova hacían cosas que no debían, ahora en Valencia van a ser los primeros en mirar al cielo boquiabiertos los fuegos artificiales y no digamos nada la ‘mascletá’ de clausura en la que no va estar el discurso de José María Aznar que, como se sabe, está retirado de la política y no en primera fila como Mariano Rajoy.

Pues esperar y barajar. La incógnita de los populares no va estar en el corrimiento hacia el centro con Cospedal de brújula, ni en la trastienda que manejará desde el AVE Javier Arenas, ni siquiera en la tregua que para este fin de semana, sólo para este fin de semana, parecen haber firmado Aguirre y Gallardón. El secreto lo tienen los habituales votantes del Partido Popular que, en plan metafórico, pueden jugar a las palabras cruzadas con Rosa Díez y hasta con María San Gil.

A lo mejor, el calvario de Mariano Rajoy no ha terminado en Valencia sino que ha empezado a la vuelta de Valencia. Y otra metáfora, a lo mejor en 2012 tenemos al gallego ‘a la luna de Valencia’.

El que se gusta, como José Tomás pero en sonriente, es Rodríguez Zapatero. La reunión con los agentes sociales –que empiezan a ser como el cobrador del frac pero en sindicalista y empresarial- fue una especie de levitación del presidente, que habló de dificultades. La única dificultad que se vislumbraba en la reunión era la de Miguel Sebastián para salir -literalmente salir- en la foto, porque mientras Solbes ocupaba el eje –nunca el centro-, a él lo relegaron a un extremo, se supone que izquierdo por eso de las metáforas.

El caso es que el presidente del Gobierno volvió a vendernos la burra vieja. Ahora que ‘hay dificultades’ –metafóricamente hablando- todos conmigo, las decisiones son de todos y no se hará nada sin que todos lo decidamos. Pues más que a metáfora suena a timo, a coartada, a encerrona, a filfa, a nada por aquí…

Pero como el ‘dream team’ está más que por la labor del consenso, pues ya verán cómo nada más llegar de Valencia y antes de que se le pase el arroz –otra metáfora- Rajoy va a la Moncloa y entra por la puerta -del centro por supuesto- para consensuar.

Y es que hacía tiempo que un Gobierno en serias dificultades y con el país de manos y de manifestaciones y de ‘aquí hay tomate’ en la Castellana madrileña,  no tenía una oposición tan…metafórica.

 

A la crisis, Solbes la llama ‘la nueva realidad’ y Sebastián está encantado porque cuanto ‘peor mejor’. Y los agricultores y los transportistas y los hipotecados y las familias en general, sin enterarse. Si es que no nos merecemos los políticos que tenemos, y mucho menos las metáforas.

Pero la mejor de las metáforas es la de apretarse el cinturón, y no digamos nada esa de ‘sin cometer errores en dos años creceremos el 3%’. ¿Quién? ¿Gasol?

Y no digamos nada de la metáfora de las banderas republicanas en el Congreso y de la metáfora de José Bono y de las imágenes de minutos y minutos de un señor ondeando la tricolor en el Parlamento. Objetivo cumplido, expulsión aparte. Y todos contentos excepto Llamazares, siempre Llamazares, a quien el comportamiento del presidente del Congreso de los Diputados le pareció ‘inadecuado y maleducado’. El político comunista siempre tan ajustado en sus apreciaciones.

Pero no todo son metáforas, que hay quienes hablan en corto y por derecho y se les entiende todo. Por ejemplo, el recibo de la luz y, aquí todo se mezcla, las Juntas Generales de Álava que le han hecho un solemne corte de mangas –pura metáfora- al plan soberanista de Ibarretxe, y ‘este lehendakari’, al que la izquierda abertzale le habla de floklore, está, cada vez, más cerca de su casa.

Y se le entiende todo a Peces Barba cuando, con su fino instinto y su visión de futuro, afirma que ‘quienes critican Rajoy en el PP son residuos del franquismo y alentaron el 23 F’. La verdad es que tiene más gracia cuando a taca a la Iglesia y quita capillas y Crucifijos de su universidad.

Metáforas y más metáforas. Mira que si María Dolores de Cospedal fuera una metáfora que en el AVE recita Javier Arenas…

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