Al presidente de Air Madrid, José Luis Carrillo, por varios meses de desastrosa gestión y encima intuir manos negras detrás de sus problemas

El Ministerio de Fomento ha dado un ultimátum a Air Madrid para que presente hoy las alegaciones que considere oportunas porque el gobierno amenaza con retirarle la licencia. El presidente, José Luis Carrillo se defiende… acusando: dice que no entiende la animadversión de Aviación Civil hacia su compañía. Pero los datos objetivos están ahí, al margen de la campaña mediática emprendida desde algunos medios que han retransmitido casi a diario los problemas de la compañía. Retrasos infames, trato abusivo a los clientes, cientos de pasajeros afectados por una mala gestión, problemas en los aparatos... En fin. Carrilo asegura que hay una mano negra en los aeropuertos que actúa contra sus aviones. Quizá la mano oscura sea la suya que ha dejado en tierra, con días de demora y muchos problemas, a usuarios que intentaban aprovecharse de unas condiciones ventajosas, pero que al final han pagado caro su osadía. Una guindilla para el señor Carrillo, que compartirán seguro los afectados.