Colau acorrala al castellano
La precampaña electoral ha empezado con fuerza en todos los ámbitos de la política española. En los próximos meses seremos testigos de proclamas y proyectos cada vez más radicales y definitorios de cada partido, con objeto de conquistar a los votantes susceptibles de depositar su papeleta en las urnas en los próximos comicios.
Barcelona no iba a ser menos. Y Ada Colau, tampoco. Teniendo en cuenta que la media de los sondeos de intención de voto publicados hasta el momento indica que la actual alcaldesa ocuparía la tercera plaza por detrás de ERC y el PSC, no es de extrañar que ésta haya sacado la artillería para relanzar su candidatura a la reelección.
Es conocido que Ada es más de destruir que de construir. Por eso la primera medida estrella que ha planteado es marginar al español, ampliando la prioridad para el catalán y aumentando el control en los comercios para que usen el idioma local. Todo emergencias para Barcelona, como es sabido.
Esta medida imita a la definida hace unas fechas desde el Govern de Pere Aragonès, en una clara búsqueda de impulso para captar el voto soberanista local. Para ello Colau ha ideado un ambicioso plan para arrinconar el castellano y “vincular la identidad barcelonesa con el catalán”.
Una de las medidas que llaman la atención por su similitud con otras de la época nazi, por ejemplo, es la de dar prioridad a las empresas proveedoras de servicios que etiqueten en catalán, en detrimento de las que lo hagan solamente en español. De igual modo, según informaba esta semana el diario el Mundo, el Ayuntamiento tendrá personal que velará expresamente para que el catalán sea la lengua por defecto en la publicidad institucional y en sus canales informativos.
Muchos analistas consideran esta medida como un brindis hacia los miembros de Esquerra, a los que Colau vería como posibles aliados del futuro Gobierno. Por su parte el PSC, que teóricamente es miembro del Gabinete de la alcaldesa, ha asegurado que desconocía este plan lingüístico, lo que escenifica algo que ya era un secreto a voces: Colau prefiere a ERC que a los socialistas a su lado. La mayor víctima, la de siempre: España y, en este caso, el idioma oficial del Estado. Empezamos bien la precampaña.
Miguel Ángel Rodríguez Caveda es periodista, ganador de tres premios Emmy y presidente de la agencia internacional de comunicación 3AW.
