Presiones sobre jueces independientes
Entendiendo por estas medidas que no gustan al Gobierno. Ha querido el turno de reparto, en este caso menos manipulado que en otros, que una jueza interrogue a los Tedax del 11 m y resuelva sobre los peritos perseguidos por opinar que las sedaciones de Leganes eran excesivas o contra indicadas.
Entonces, de forma sorprendente, un medio vinculado al gubernamentalismo extremo, al zapaterismo radical o al rubalcabanismo mas fiel, puestos a poner adjetivos que no quede, dice que la jueza es de derecha extrema por que se presentó en el año 1979 a las elecciones por Unión Foral Guipuzcoana.
Llegados a este punto conviene recordar lo siguiente. En primer lugar, en el año 1979 ETA estaba en una campaña de exterminio de todo el Centro derecha legal “españolista”, como ellos le llamaban. Presentarse por un grupo vinculado a los populares en Guipúzcoa en aquel año requería un valor extremo, en efecto. Por cierto, cumpliendo el escolio de Gómez Dávila, entonces la izquierda que sólo condena la violencia cuando la ve a sus puertas, mostraba una escasa solidaridad con la UCD o AP literalmente en fase de exterminio.
En segundo lugar el libelo parece insinuar relaciones entre Unión Foral y algún grupo terrorista. Me permito recordar que la única relación probada ante tribunales es la del Partido socialista o al menos su Gobierno con los GAL. Sin hacer falsos puritanismos podemos ver quienes estaban unos años después en el Gobierno y quienes están ahora. No sale, precisamente, Coro Cillán.
Y en tercer lugar, si nos remontamos al año 1979 cada uno estaba donde estaba y no podemos deducir de ello la actitud actual. Hay gente que ha ido de un sitio a otro desde el año 79 y sólo con el denominador común de estar en todo caso cerca de los distintos poderes. Ese tampoco es el caso de la magistrada independiente y si de varios miembros del agitpro.
