Se habla de una quincena de parlamentarios ‘rebeldes’

Ferraz tiembla: los diputados del “no a Rajoy” amenazan con incumplir la disciplina de voto toda la legislatura

Los díscolos formarían grupo opositor interno. La gestora amaga con enviarles al Mixto para no dividir a la bancada socialista

El nuevo Grupo Socialista, con Antonio Hernando al frente.
El nuevo Grupo Socialista, con Antonio Hernando al frente.

La reunión del Grupo Socialista en el Congreso, previa al discurso de Rajoy en la primera sesión de investidura, demostró que el PSOE continúa roto. Los defensores del “no a Rajoy” mantuvieron su postura y apostaron por una “abstención mínima de 11 diputados”. La gestora, por su parte, insistió en su amenaza de echarlos. De fondo, existe el riesgo de un incumplimiento permanente a la disciplina de voto.

Según explican a El Confidencial Digital dirigentes del PSOE próximos a la gestora presidida por Javier Fernández, en Ferraz se está lanzando un mensaje de ultimátum a los diputados que defienden el “no a Rajoy” con un claro objetivo: evitar que se cree un “subgrupo de díscolos” dentro de la bancada socialista.

Y es que, desde la gestora, se teme que los parlamentarios afines a Pedro Sánchez no solo se atrincheren de cara al debate de investidura, sino que hagan permanente el incumplimiento de la disciplina de voto. En ese sentido, en la actual dirección del PSOE se sospecha que los contrarios a la abstención mantendrán su postura enfrentada a Ferraz durante toda la legislatura.

Ese comportamiento, aseguran las fuentes consultadas, puede “hacer ingobernable” un grupo parlamentario partido en dos. Además, dificultaría cualquier negociación con otras formaciones políticas y también la propia labor de oposición, ya que “no se puede construir desde la confrontación”.

Una quincena de diputados díscolos

Desde Ferraz tienen identificados a todos los diputados que, de mantener su postura de aquí al sábado, votarán “no” a la investidura de Rajoy, saltándose la disciplina de voto y, además, abriendo el camino para que esa división se mantenga a lo largo de la legislatura.

Además de los siete diputados del PSC, la gestora contabiliza también a Pedro Sánchez, César Luena y otros parlamentarios afines al ex secretario general. Entre ellos, destacan los nombres de Margarita Robles, María González Veracruz, Odón Elorza y Zaida Cantera, entre otros.

En total, “más de una quincena” de diputados díscolos que amenazan con ser todo un quebradero de cabeza para el grupo parlamentario.

Un problema de difícil solución

Ante este reto, la única solución que ha planteado a la gestora ha sido la amenaza de expulsión, al Grupo Mixto, de todos y cada uno de los diputados que no se abstengan el próximo sábado en la segunda votación de investidura de Rajoy.

Una decisión que no convence a dirigentes del grupo parlamentario ni tampoco a altos cargos del partido, que avisan de los riesgos de esa maniobra. En concreto, señalan que, de confirmarse la expulsión, harían de Pedro Sánchez un “mártir” y, además, provocarían el sorpasso de Podemos en la Cámara, ya que la formación morada tendría más diputados que el PSOE.

Así las cosas, algunos dirigentes hablan ahora de que “no hay ninguna solución” y que, quizá, esta situación de bloqueo se tenía que haber evitado yendo a nuevas elecciones: “Es posible que hubiéramos perdido escaños, pero ahí la actual gestora hubiera estado sustentada por un grupo parlamentario fiel que ahora, desde luego, no tiene”.

 

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