Pedro Solbes está amortizado definitivamente. Zapatero le ha dejado fuera en sus consultas para decidir cómo afrontar la grave crisis económica

Las ‘ausencias’ de Pedro Solbes, físicas (brotes de sueño en público) y mentales (muchas veces parece distraído, como si no estuviera en lo que le corresponde), han pasado al nivel de ausencia política. Zapatero no le da cancha ni cuenta con él a la hora de abordar el más grave problema que tienen este país y su Gobierno: la crisis económica.

La prueba más clara, y definitiva, ha sido la reunión restringida revelada ayer, en exclusiva, por El Confidencial Digital. La cena que el presidente convocó, en su residencia del Palacio de La Moncloa, con tres eminentes ‘cerebros’ económicos, Emilio Ontiveros, Juan José Toribio y Ángel Laborda, a la que invitó también al ministro de Industria, Miguel Sebastián, pero en la que no estuvo el vicepresidente Solbes (ver noticia).

La cita, gestionada con la mayor discreción, tenía como objeto analizar, junto a los citados expertos, la situación de la economía española, en el marco de una crisis global, y las posibles recetas para minimizar sus efectos y, en lo posible, salir de ella cuanto antes y en buenas condiciones.

La ausencia de Pedro Solbes ha disparado aún más los rumores de una inminente crisis de Gobierno, que ya saltaron con fuerza después de que Zapatero hiciera alusión a la posible creación de un “Ministerio de Deporte”, referencia que fue interpretada inmediatamente como que el presidente de Gobierno estaba ya trabajando en esa remodelación.

Para sustituirle en la vicepresidencia económica siempre se ha citado a Miguel Sebastián, y su presencia en la cena del martes apuntaría en esa dirección. Tal como ECD informaba ayer, también el nombre de otro de los asistentes, Emilio Ontiveros, se ha manejado como posible alternativa a Pedro Solbes, aunque no hay que descartar que, si finalmente Sebastián asume la vicepresidencia, Ontiveros ocupe otro ministerio del área económica, incluso desgajando de nuevo Economía de Hacienda.

En ese sentido, la alusión de Zapatero a la creación de un nuevo ministerio de Deporte abona la impresión de que, cuando se produzca la crisis, habrá también cambios en la estructura del Ejecutivo, con creación y supresión de departamentos.

 

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