El fichaje del general que mandó la Fuerza Terrestre por una curiosa empresa de marketing
El Ejército de Tierra registró el pasado otoño varios cambios en algunos de los puestos más importantes de su estructura. El teniente general Carlos Melero sustituyó a José Rodríguez García al frente de la Fuerza Terrestre.
La Fuerza Terrestre agrupa a “un conjunto de unidades del Ejército de Tierra que tienen por cometido principal prepararse para constituir, de forma rápida y eficaz, estructuras operativas terrestres para la realización de operaciones militares”. Tiene su cuartel general en Sevilla y de ella dependen las dos divisiones de Tierra, ‘Castillejos’ y ‘San Marcial’, y el Mando de Apoyo a la Maniobra. El teniente general Rodríguez pasó a la reserva al cumplir diez años como oficial general.
El Chivato ha podido comprobar que no se habían cumplido los tres meses desde su cese cuando el teniente general en la reserva recibió, el 9 de enero, autorización de la Oficina de Conflictos de Intereses para dedicarse a una actividad privada.
La autorización es para trabajar en Heymorich SL. Sobre esta empresa hay muy poca información cuando se realiza una búsqueda en Google, por ejemplo. Apenas aparecen referencias en directorios de empresas. De los pocos datos que figuran cabe concluir que se trata de una sociedad limitada, que se constituyó en 2007 con el nombre H-Eymorich SL, y que en 2019 retocó esa denominación para pasar a ser Heymorich SL.
La actividad de la empresa no queda muy clara. En algunos de estos registros se indica que su objeto social es “la elaboración de proyectos, asesoría comercial y de marketing y prestación de servicios relativos a la organización de promociones comerciales, eventos corporativos, convenciones y otros actos de similar naturaleza”. Y en otras referencias se puede leer que su misión es “la intermediación en las siguientes actividades: 1.- La consultoría en materia de servicios de gestión, implantación y desarrollo de empresas en los planos nacional e internacional. 2.- Las actividades de consultoría, estrategia comercial y posicionamiento de empresas”.
Se trata de actividades que, al menos a primera vista, parecen estar lejos del trabajo de los militares.
En los últimos años, más de una docena de oficiales generales de las Fuerzas Armadas han recibido autorización para trabajar en empresas privadas, una vez dejaron el servicio activo y pasaron a la reserva.
Algunos ficharon por grandes empresas, como Abengoa, Petronor y la Fundación Iberdrola. La mayoría se incorporaron, como asesores o incluso como presidentes, a compañías relacionadas con la industria militar, la aeronáutica, la seguridad o las telecomunicaciones: Airbus España, General Dynamics Santa Bárbara Sistemas, Hisdesat, Tecnobit, Sener Aeroespacial, Maxam, Proyectos de Interés para la Defensa Argos, Oesia, TRC...
El Chivato ha tratado de contactar con Heymorich SL a través de algunas direcciones de correo electrónico ligadas a la empresa. No ha habido respuesta.
La compañía, según los boletines del Registro Mercantil, cambió su sede de la Plaza de la Independencia (Puerta de Alcalá), en Madrid, al número 3 de la calle de Montalbán, prácticamente frente al Cuartel General de la Armada, y a espaldas del Ayuntamiento de Madrid.
Sin embargo, en unos directorios aparece en el 3º Izquierda de ese portal, y en otros, en el 5º Izquierda. Pero en el telefonillo y en los letreros del portal se indica que en el piso 3º Izquierda se ubica actualmente Sommos, una clínica de psiquiatría y psicología. En el 5º Izquierda no hay ningún cartel que identifique al inquilino.
Curiosamente, son numerosas las empresas y entidades que en Internet aparecen referenciadas a esos dos inmuebles. Hay otra empresa de atención psicológica, una clínica dental, varias inmobiliarias, un despacho de abogados, una fundación a favor de la competitividad empresarial...
El teléfono de un contacto de comunicación de Heymorich ya no corresponde a nadie de esta sociedad. A un número de teléfono fijo de una fundación que ocupó el 3º Izquierda atendió personal de esa empresa, pero que ya no está ubicada en la calle de Montalbán.
Algunas personas que han tenido contacto con Heymorich explican que funcionaba más como una agencia de comunicación, y sugieren que no tienen claro si continúa su actividad.
Cabe citar otra referencia a Heymorich que aparece en Google. “Elena Sánchez Álvarez. Presidenta de Heymorich SL”, se puede leer en el listado de vocales del patronato de la Fundación Independiente. Esta entidad se fundó en 1987, y declara que tiene como misión “potenciar una sociedad civil responsable y participativa desde unos postulados humanistas”, fomentando el debate público y social en España sobre las grandes cuestiones que afectan a la convivencia civil.
