Qué tipos de fuego existen y que tipo de extintor es el adecuado para cada uno

Cuando vemos un fuego pensamos que todos son iguales y que las llamas se extinguen de la misma forma, con agua o con el primer extintor que tengamos a mano, pero lo cierto es que no es así.

Hemos preguntado a Extintores Presman y nos han explicado cuántos tipos de fuego hay y qué extintores se pueden usar en cada uno de ellos.

Qué tipos de fuego se pueden diferenciar

La normativa europea actual clasifica los fuegos en seis clases o tipos diferentes:

1. clasClase A. Son los fuegos con combustible sólido como los que se dan en los bosques o en los almacenes en los que hay cartón y madera.
2. Clase B. Estos fuegos se producen por líquidos del tipo de la gasolina, la pintura, el aceite o cualquier líquido que se pueda inflamar.
3. Clase C. Se inician por los gases que todos conocemos: butano, propano, metano, etc.
4. Clase E. Fuegos eléctricos que se originan por un mal funcionamiento de un aparato eléctrico o un cortocircuito.
5. Clase D. Los producen metales combustibles y casi siempre se dan en industrias que trabajan con ellos. Son de los más complicados de extinguir.
6. Clase F o K. Muy comunes, son los que ocurren en las cocinas cuando se prende el aceite o la grasa con la que estemos guisando.

¿Qué tipo de extintor hay que usar en cada uno de ellos?

Cada uno de los fuegos tiene su extintor adecuado con el fin de apagarlo, aunque hay algunos que pueden servir en varios de estos incendios, siendo estos los que más se suelen ver.

De todas maneras, conviene conocer qué extintores son los que tenemos a mano en nuestra vivienda, comunidad de vecinos, empresa, y qué llamas podemos apagar con ellos.

Extintores de agua

Sirven en los fuegos de clase A porque enfrían el entorno, lo que consigue apagar los incendios de combustibles sólidos. Eso sí, jamás hay que emplearlos si hay riesgo eléctrico.

Extintor de agua pulverizada

Tira el agua en forma de niebla, por lo que van muy bien en los incendios de clase A y clase B.

Extintores de espuma

Destinados a los fuegos de clase A y B son muy comunes, terminando con el fuego tanto por enfriamiento como por sofocación.

Extintor de polvo químico

También es muy habitual y hay varias clases que pueden acabar con los fuegos A, B, C y D, dependiendo del polvo que lleve en su interior.

Extintor de CO₂

Dirigido a los fuegos del tipo A, B y C, en los que hace que la temperatura baje de manera brusca. Es el ideal cuando el incendio tiene un origen eléctrico, ya que no conduce la electricidad, y de hecho es normal verlo cerca de los cuadros eléctricos.

Se distingue porque suele ser más delgado que los otros extintores, y además tiene una boca diferente, mucho más larga y grande.

Al emplearlo en un lugar cerrado es importante salir en cuanto el incendio se haya sofocado, pues puede ser tóxico para las personas.