El Gobierno crea 25 Consejerías de Interior en las Embajadas en el extranjero para luchar contra el terrorismo islamista y la inmigración ilegal

Las Conserjerías de Interior ayudarán a mejorar la coordinación entre las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE) y sus servicios operativos con los servicios policiales de otros países. El Gobierno ha dispuesto que sean 25.

La iniciativa responde a “la necesidad de reestructurar el despliegue en el exterior en materia de seguridad” que comenzó en noviembre de 2006. Casi dos años después, a finales de mayo pasado, el Gobierno reguló el trabajo que “se había venido realizando a través de Agregadurías” desde años atrás y decidió la creación de las nuevas áreas.

El objetivo fundamental que pretende la nueva medida es “la potenciación de este despliegue en las áreas geográficas donde la esfera del terrorismo internacional de carácter islamista tiene raigambre y en otras que son origen o tránsito de la inmigración ilegal que afecta a nuestro país. En otros casos, la actividad de las organizaciones criminales en materia de tráfico de estupefacientes y otros delitos graves hace necesario este refuerzo”.

Para el Gobierno, “esta medida mejorará la coordinación entre las Fuerzas de Seguridad del Estado y sus servicios operativos con los servicios policiales de otros países. Además, la dependencia de estas Consejerías, establecida en la Secretaría de Estado de Seguridad, servirá el enlace con otros departamentos del Ministerio del Interior, especialmente con el Centro Nacional de Coordinación Antiterrorista (CNCA) y con el Centro de Inteligencia contra el Crimen Organizado (CICO)”.

Las Conserjerías de Interior aprobadas estarán en las Misiones Diplomáticas Permanentes de España en Alemania, Andorra, Argelia, Argentina, Brasil, Chile, China, Colombia, Cuba, Ecuador, Estados Unidos, El Salvador, Francia, India, Israel, Italia, Marruecos, México, Pakistán, Portugal, Reino Unido, Rusia, Senegal, Turquía y Venezuela.

Se da la circunstancia de que los miembros de las FCSE que podrán optar a una plaza han de “estar en situación administrativa de servicio activo”, “poseer una antigüedad de cinco años, al menos, en el Cuerpo al que pertenezca” y “acreditar el conocimiento suficiente del idioma o idiomas necesarios para el desarrollo del puesto”. Además, “en la convocatoria podrán exigirse requisitos adicionales en función de la naturaleza y situación del puesto de trabajo”.

Sin embargo, el Gobierno advierte que “cuando se trate de un miembro de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, el Consejero deberá pertenecer a la Escala Superior de Oficiales de la Guardia Civil o a las Escalas Superior o Ejecutiva del Cuerpo Nacional de Policía”. Es decir, los miembros que ascienden por escala interna no pueden optar al puesto aun estar en disposición de mejores capacidades o cursos adquiridos respecto a otros mandos.

 

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