Podemos tiene opciones de consolidarse como el nuevo partido radical de izquierdas

El caso de la formación liderada por Pablo Iglesias, convertida por sorpresa en cuarta fuerza política en las elecciones europeas de mayo, puede acabar en la creación de ese nuevo partido, si no cometen errores graves y, sobre todo, no se pierden en un asambleísmo permanente, explican expertos consultados por El Confidencial Digital.

El desafío es no caer en la inoperatividad, como ya les pasó con el movimiento 15-M, una lección que han aprendido.

Las crisis y el paro van para largo

Las opciones de podemos para conseguir crear esa partido de izquierda radical provienen de que la crisis y el paro van para largo, y por tanto el descontento en extensa capas sociales va a continuar. Y ese es el campo electoral en el que se ventila el futuro político.

De acuerdo con los analistas políticos y sociólogos a los que ha preguntado ECD, si Podemos persevera en su estrategia y trabaja su target electoral tiene mucho que ganar.

Ese target es muy grande, en un país en crisis, con un paro brutal para muchos años y una juventud desesperada. Nada irrumpe en la sociedad si no hay terreno abonado a una nueva fuerza política. En España existen raíces profundas para que crezca un partido radical en sus propuestas como una planta en terreno abonado.

Desde la ira a las redes sociales

El abono para la aparición de ese partido es la ira por la crisis económica y el desencanto con la clase política.

Podemos ha focalizado muy bien en la “casta política” a los administradores de la crisis, los que siguen viviendo como si nada pasara. El PP y el PSOE están señalados ante la opinión pública, y lo único que pueden esperar es desgaste electoral.

Para las nuevas generaciones son partidos “viejos” y desacreditados, lo tienen muy difícil, al contrario que Podemos que habla el lenguaje de las nuevas generaciones y utiliza las redes sociales e Internet con soltura y eficacia.  

La deriva asamblearia

Si Podemos administra bien su talento directivo (que lo tiene) y no se deja llevar por cantos de sirena ni comete errores graves, tiene posibilidades de consolidarse y hacer un hueco, con grave quebranto para los partidos instalados, y no terminar como una estrella fugaz. Se está diciendo que son ‘friquis’, que es un fenómeno tipo Ruiz Mateos. Eso es un error, hay mas  estrategia, ideología y talento de lo que parece, dicen los expertos consultados.

Hay que esperar a ver si ‘arman’ un partido de verdad, se extienden por toda España (Madrid es hoy un bastión para ellos) y articulan un discurso menos utópico, sin caer en lo asambleario.

Su programa máximo ha servido para cazar votos con una red muy grande, y parece que deliberado, acabarán puliéndolo y haciéndolo mas realista. Son inteligentes, el que no tengan experiencia política directa no es un hándicap.