“Con Ramón Jáuregui esto no hubiera pasado”. La cúpula del PSOE critica amargamente a Alonso y Madina tras el ‘no’ a la subida de impuestos

“Con Ramón Jáuregui esto no hubiera pasado”. En la cúpula del PSOE se ha criticado con contundencia la actuación de los responsables del grupo parlamentario socialista, José Antonio Alonso y Eduardo Madina, tras la mala gestión de las negociaciones parlamentarias a propósito de la moción de IU-ICV sobre las subidas de impuestos.

La moción fue finalmente rechazada por el grupo parlamentario socialista tras haber anunciado que prestaría su asentimiento. Se trataba de dar “un giro a la izquierda” a la política recaudatoria, subrayando la progresividad fiscal. Entre otros puntos, se buscaba que algunas rentas privilegiadas, como las de los futbolistas extranjeros, tributaran más. “En esta situación de crisis, o bajas gasto o subes ingresos”, explicaba un parlamentario socialista a El Confidencial Digital para justificar la medida prevista.

Fue el grupo catalán de CiU el que finalmente amenazó al Gobierno con retirar otros apoyos si el PSOE aprobaba la moción. Los nacionalistas se hicieron valer y los socialistas recularon en el último momento, con el consiguiente revuelo mediático.

Este “sí” transformado en “no” ha suscitado amargas críticas en Ferraz. Fuentes de la cúpula del PSOE a las que ha tenido acceso El Confidencial Digital muestran su irritación ante la actuación de los jefes del grupo parlamentario socialista, José Antonio Alonso y Eduardo Madina, a quienes culpan directamente del fracaso público de las negociaciones. Y dan la clave de lo acontecido: “con (Ramón) Jáuregui esto no hubiera pasado”.

Y es que el que hasta fechas recientes ha sido secretario general del grupo parlamentario socialista, despedido esta misma semana rumbo a su escaño en Bruselas entre el aplauso unánime de los diputados, ha sido sustituido por un Eduardo Madina al que, según diversas fuentes socialistas consultadas por ECD, “le quedan unos meses” pues “todavía tiene que aprender”. Esto, pese a la muy buena fama de que goza el vasco entre los diversos grupos.

La sensación en las más altas instancias de Ferraz es que el hueco dejado por Jáuregui, notable por realizar las negociaciones que no realizaba un Alonso con fama de apatía, aún no ha sido cubierto adecuadamente. Y la votación sobre el “giro a la izquierda” tributario ha sido una muestra evidente de la mala gestión parlamentaria en un momento de debilidad de apoyos en la Cámara Baja.

Aun así, en el grupo parlamentario socialista también se critica la “inflexibilidad” de los diputados de IU-ICV, notablemente Joan Herrera, a quien acusan de un exceso de “vanidad” y “personalismo”: a un sector del grupo socialista le ha gustado quitarle el simbólico triunfo en la votación a Herrera precisamente para no someter “tantos escaños como tiene el PSOE a un solo diputado como es Herrera”.

Respecto de la política fiscal, “unas medidas sí y otras no” irán en el marco de ese “giro a la izquierda” que postulaba el PSOE en materia de incremento de recaudación por impuestos.

 

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