Exteriores no entiende por qué Israel ataca más a España
Argumentan que otros líderes europeos e internacionales también han exigido un “alto el fuego” y han criticado la muerte de civiles palestinos, pero no han sufrido ningún choque diplomático con Netanyahu
Exteriores da por concluido el choque diplomático con Israel. El presidente del Estado hebrero, Benjamin Netanyahu, llamó a consultas a la embajadora de su país destinada en España, Rodica Radian-Gordon, tras las críticas del líder del Ejecutivo, Pedro Sánchez, por la muerte de niños civiles palestinos a causa de los bombardeos del ejército israelí en la Franja de Gaza. Pero no entienden la magnitud del enfado y de la crisis diplomática ocasionada por unas palabras que, según Moncloa, han afirmado también otros líderes europeos y mundiales, como Estados Unidos.
La retirada de la representante diplomática de Israel fue el último de varios choques ente ambos países. Como adelantó ECD, el Gobierno de Netanyahu llamó hasta cuatro veces al embajador español para reprenderle por las palabras de Sánchez y de varios ministros.
¿Por qué contra nosotros?
La principal duda que queda por resolver del conflicto diplomático entre España e Israel, según consideran en Exteriores, es por qué la reacción del país hebreo ha sido tan agresiva en comparación con otros países.
Una pregunta que continúa sin respuesta, pero levanta sospechas dentro del ministerio. Una de estas hipótesis sitúa el foco en la presidencia del Consejo de la Unión Europea que ahora ostenta España. Un cargo rotatorio que ocupan los distintos países comunitarios durante un periodo de seis meses. Sánchez accedió a dicha presidencia el pasado mes de julio y será relevado por Bélgica el próximo 1 de enero de 2024.
Este cargo otorga cierto escaparate internacional, como representante de la UE, y fuentes consultadas por este medio consideran que podría ser una de las causas por las que Netanyahu hubiese decidido ser tan crítico con Sánchez.
Otros líderes que han criticado a Israel
Los presidentes de Irlanda, Malta y Bélgica se han mostrado reiteradamente a favor de un alto el fuego en Gaza. Incluso Estados Unidos, el mayor aliado de Israel en Occidente, le ha solicitado que rebaje la intensidad de sus ataques militares. Los bombardeos de Israel han causado la muerte a más de 20.000 palestinos en un territorio de apenas 300 kilómetros cuadrados y más de dos millones de habitantes: una de las zonas con mayor densidad de población de todo el mundo.
Aunque el apoyo de EE UU a Israel en su ofensiva se ha mantenido firme desde el inicio del conflicto, el secretario de Defensa norteamericano, Lloyd Austin, ha dado pie a que comiencen “operaciones de alta intensidad a unas de baja intensidad y más quirúrgicas”.
Además, la propia Unión Europea solicitó el pasado 15 de diciembre a Israel que cumpliera el derecho internacional y garantizara la protección de civiles en Gaza. “Reiteramos la importancia de garantizar la protección de todos los civiles en todo momento, de conformidad con el derecho internacional humanitario”, apunta la declaración emitida por los Veintisiete.
Unas palabras calcadas a las utilizadas por el presidente español, que solicitó a Netanyahu en su visita a Israel el pasado 23 de noviembre, que respetara Israel debía respetar los derechos humanos y el derecho internacional. Así como le reprochó la muerte de niños en Gaza. Unas palabras que fueron calificadas como “apoyo al terrorismo” por parte de las autoridades israelíes.
Por su parte, Antony Blinken, secretario de Estado de EE UU —cargo homólogo al ministro de Exteriores en España—, afirmó: “La forma en la que Israel haga esto importa. Debe afirmar los valores compartidos que tenemos por la vida y la dignidad humana, tomando todas la precauciones posibles para evitar el daño a civiles”.
En guerra desde el 7 de octubre
El pasado 7 de octubre el grupo terrorista Hamás atacó distintos puntos de Israel, secuestrando y asesinando a decenas de civiles. Un ataque que se engloba dentro del conflicto que arrastran palestinos e israelíes desde 1948. La reacción del país hebrero fue contundente y desde entonces han bombardeado Gaza para eliminar a todos los milicianos de Hamás.
El gobierno israelí ha asegurado que no detendrá su ofensiva hasta que no quede ni un solo miembro de la banda terrorista en la Franja. Pero la cifra de civiles muertos —que ya triplica las bajas israelíes— ha llevado a la ONU a pedir un alto el fuego inmediato para detener la masacre.
El pasado 12 de diciembre la Asamblea General de la organización pidió el cese del ataque israelí —"alto el fuego humanitario"— por una amplia mayoría: 153 votos a favor, 10 en contra y 23 abstenciones. De todos los países comunitarios solo Austria, República Checa se opusieron.
