Irene Montero se aleja de Pablo Iglesias: rechaza una alianza con ERC, Bildu y BNG

Podemos fía la batalla con Sumar a Irene Montero en las Europeas, donde por primera vez se enfrentarán electoralmente a nivel nacional. La dirección de Ione Belarra apuesta por la exministra de Igualdad como principal referente para medirse frente Yolanda Díaz. En cambio, Pablo Iglesias apuesta por una alianza con los independentistas.

Según ha podido saber Confidencial Digital por fuentes de la cúpula morada, la candidata Montero rechaza el plan de concurrir a los comicios del 9 de junio junto a ERC, EH Bildu y BNG, con quienes el ex líder de Podemos guarda especial sintonía.

Las últimas elecciones europeas se celebraron en 2019, cuando todavía estaba al mando de la formación Iglesias. En aquellos comicios, Unidas Podemos logró seis escaños y 2,2 millones de votos. El electorado no tenía entonces que dividirse entre dos papeletas, como sí ocurrirá en esta ocasión.

Desde entonces, el partido morado ha sufrido un tremendo proceso de debilitación. ERC, Bildu y el BNG, que concurrieron juntos bajo la sigla de Ahora Repúblicas, alcanzaron 1,2 millones de votos y tres diputados. Las formaciones nacionalistas repitieron una fórmula de coalición que también sellaron en las elecciones de 2014, y todo apunta ahora a que se repetirá en las de 2024.

El ex líder morado defiende que la suma de ambas fuerzas, junto al ahora en auge BNG, podría llevarles a sacar más rédito a los votos (calcula que un millón de sufragios más) y ampliar la representación en el reparto de escaños.

Un liderazgo sólido

En el entorno de la ex ministra son optimistas respecto a sus opciones y no sólo dan por hecho que Montero logrará entrar en el Parlamento Europeo sino que algunas voces van más allá y afirman que superarán a la lista de Yolanda Díaz.

La candidata morada ha exigido “autonomía” y no está dispuesta a renunciar a encabezar la lista en caso de una alianza con los tres partidos nacionalistas.

Consideran que la proyección nacional de la número dos de Podemos ganará el pulso a la propuesta de la líder de Sumar, que a día de hoy no tiene ningún candidato que pueda disputar en cuanto a visibilidad a la dirigente morada.

Medirse con Yolanda Díaz

La posibilidad de unirse para las Europeas se presentaba también como escenario ciertos sectores de ERC, y algunas voces del partido republicano en Madrid no descartaban esta alianza, insistiendo en la buena imagen que tiene la candidata Montero entre su electorado.

En el entorno de Irene Montero, en cambio, rechazan esta confluencia, al considerar que será la primera ocasión donde puedan medir sus fuerzas con Yolanda Díaz en una cita electoral.

Castigo en Madrid, Valencia…

Aseguran, además, que acudir con el independentismo como aliado podría distorsionar los resultados. No sólo porque impediría poner blanco sobre negro el número de votos de cada fuerza, sino porque una alianza con el separatismo castigaría electoralmente en lugares clave del territorio nacional como son Madrid o Comunidad Valenciana.

Cuentan con que el sistema electoral, sin umbral mínimo de voto y de circunscripción única, facilita la traducción de papeletas en escaños. El hecho de que esta vez se repartan dos escaños más en España -61 en total- contribuye además a que Podemos obtenga representación con más facilidad.

Frente con ERC y Bildu

La relación entre el partido fundado por Pablo Iglesias y las fuerzas independentistas siempre ha sido buena, pero la pasada legislatura se estrecharon los vínculos, al emerger Podemos como el gran interlocutor para buscar su apoyo en las medidas del Gobierno de coalición.

La salida del partido del grupo parlamentario de Sumar ha reforzado todavía más esta alianza, y la coordinación entre Podemos, republicanos y abertzales prevé ir in crescendo conforme avance la legislatura para hacer un frente común que haga de contrapeso a la coalición y al partido de Yolanda Díaz.

Los cuatro diputados morados se suman a los seis escaños de EH Bildu, los siete de ERC y el único dirigente del BNG. Un total de 19 votos imprescindibles para aprobar o tumbar las medidas del Gobierno.

El plan de los morados pasa por señalar la tibieza progresista del actual Gobierno y emerger como un bloque frente a la “socialdemocracia” del Ejecutivo, donde equiparan al PSOE y a Yolanda Díaz, y frente a Junts y PNV, fuerzas conservadoras que han respaldado a Pedro Sánchez y podrán condicionar su acción legislativa.

Podemos y ERC, contra Díaz

El enfrentamiento abierto entre ERC y Yolanda Díaz la pasada legislatura, cuando los republicanos y EH Bildu votaron contra la reforma laboral de la ministra de Trabajo, también contribuyó a unir fuerzas con Podemos, que en aquel momento ya plantaba un primer pulso con Sumar.

Conforme el conflicto se fue elevando, morados e independentistas unían aún más sus fuerzas. Cuando se planteó el veto a Irene Montero en las listas a las generales, el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, no dudó en defender a la entonces ministra de Igualdad. Ambos tenían a la líder de Sumar como enemigo común.

Tanto es así que, en la campaña de las generales, donde Podemos concurrió en la coalición bajo la marca Sumar, Irene Montero apareció junto a dirigentes republicanos mientras evitaba participar en ningún acto de la candidatura integrada por los morados.