El PACMA ha pinchado en las europeas por el “efecto arrastre” de las municipales y autonómicas
Los analistas consideran que los potenciales votantes del partido animalista optaron por candidaturas mayoritarias en las locales y no cambiaron la papeleta para la urna de la UE
La resaca electoral del pasado domingo 26 de mayo aún perdura y hace que, todavía, ciertos partidos estén lamiéndose las heridas.
Un ejemplo claro son los animalistas del PACMA, quienes tenían depositada su confianza en el modelo de circunscripción única de España que rige las elecciones europeas para lograr arrancar algún escaño en Bruselas.
La "injusta ley electoral"-como dicen desde la formación- que les impedía entrar en el Congreso de los Diputados en las pasadas elecciones generales del 28 de abril no iba a suponer en este caso ningún impedimento.
Sin embargo, los animalistas lograron 273.000 votos y no conseguían irrumpir en las instituciones europeas. Un número inferior al que cosecharon el 28A, cuando alcanzaron los 326.045 votos.
Las municipales y europeas como principal escollo
El 26 de mayo fue un superdomingo electoral. Tres urnas distintas se apostaban en las mesas de cada colegio. Se decidían gobiernos autonómicos, alcaldías y diputados europeos.
Según expertos en política consultados por ECD, este hecho pudo suponer el gran bache que frustró las aspiraciones europeas de los animalistas. Y es que, al coincidir estos tres comicios en una misma cita electoral, el votante "suele arrastrar las papeletas".
En otras palabras, era más complicado que el PACMA alcanzase un número de votos representativo para aterrizar en Bruselas debido a que el electorado suele repetir los tres votos, aunque a veces no coincidan las siglas, pero sin dar cabida a "arriesgar" o "darse el capricho" de votar a un partido tan alejado de la política diaria como puede ser PACMA.
Falta de medios y de visibilidad
Tres semanas antes de que se celebraran los comicios, PACMA hizo público en su página web un comunicado expresando su optimismo ante la posibilidad de obtener representación en el Parlamento Europeo.
Señalaban la ventaja que suponía el sistema electoral europeo respecto al español. Al no existir la barrera del 3% necesaria para acceder a las instituciones nacionales y al funcionar el modelo de circunscripción única en toda España, los animalistas se veían con posibilidades de desembarcar en Bruselas.
Esta idea se esfumó cuando llegaron los resultados. Sus 273.000 votos no fueron suficientes. En declaraciones posteriores, el partido lo achacaba a su "falta de medios" y "escasa visibilidad".
No participaron en ningún debate televisivo para las europeas, como pudo ser el de TVE o La Sexta, y tampoco contaron con grandes medios de financiación para lanzar una campaña más fuerte.
Su punta de lanza era una estrategia activa a través de las redes sociales, en las cuales han protagonizado algunas polémicas en los últimos meses que les hicieron ganar notoriedad. Sin embargo, no fue suficiente para movilizar a un electorado que les premiara con un preciado sillón en Bruselas.
