Pedro Sánchez tiene un plan B para ‘asustar’ a Junts: amenazar con la repetición de las elecciones
Ha trasladado a los ministros que sugieran esa posibilidad, con el argumento de que sus encuestas concluyen que el PSOE mejoraría los resultados del 23-J
- Amagar con ir a la repetición
- Un plan B para ‘asustar’ a Junts
- El PSOE mejora los resultados del 23-J
- El primer CIS pone en cabeza a Sánchez
La investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno es cuestión de tiempo. Es lo que él ha venido a decir en los últimos días, aunque sin entrar en detalles. Pero, además, Moncloa tiene un “plan B” para frenar las demandas excesivas de Junts durante la negociación.
Sánchez viene insistiendo en que se dedicará “en cuerpo y alma” a lograr una mayoría para su investidura, si la próxima semana fracasa la del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, algo que da por seguro.
Y ha anticipado que hablará con el resto de fuerzas políticas y también “con la sociedad civil” para lograr un acuerdo que sea “plenamente coherente con la letra y el espíritu de la Constitución”.
Esas declaraciones han recordado en el PSOE al Sánchez de 2019, que se enfrascó en un maratón de reuniones con la sociedad civil, estrategia que le sirvió para esquivar el pacto con Podemos y regresar a las urnas.
Amagar con ir a la repetición
Ahora, Sánchez se ha limitado a proclamar que “habrá un gobierno progresista” porque, en esencia, “hay números para que el PSOE siga gobernando cuatro años más”. Además, ha arengado a los suyos diciendo que a la derecha no le preocupa España “sino que el PSOE no gobierne”.
Sin embargo, según ha podido saber Confidencial Digital por fuentes con acceso a La Moncloa, el presidente ha trasladado a los ministros y a la dirección del PSOE que se ha planteado comenzar a lanzar el mensaje soterrado de que no le importaría demasiado que se vuelvan a celebrar elecciones generales como resultado de una investidura fallida.
Se trata de que lo vayan comentando en voz baja los principales dirigentes del partido, incluidos algunos miembros del Gobierno. El objetivo es que esa posibilidad llegue a oídos de la dirección de Junts, para así ‘asustarles’ y que rebajen sus demandas de cara a la investidura.
Un plan B para ‘asustar’ a Junts
Es un “plan B” que Moncloa se plantea, admiten en el equipo de Pedro Sánchez, después de que el ex president catalán Puigdemont, al ver que PSOE y Sumar abogan por una negociación en la que se renuncie a la unilateralidad, y que implique a todos los actores sociales, haya remarcado que “las condiciones no las pone quien pide ayuda para la investidura”.
El diálogo entre el PSOE y Junts per Catalunya es continuo desde la elección de la Mesa del Congreso el pasado 17 de agosto. El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, y Jordi Turull, secretario general del partido de Carles Puigdemont, encabezan esa negociación.
Jaume Asens, de En Comú, mantiene desde hace tiempo una vía de comunicación permanente con Waterloo, pero no es el interlocutor de referencia: Moncloa ya ha advertido claramente de que lo es el PSOE.
El PSOE mejora los resultados del 23-J
En Presidencia destacan que no existe ni una sola declaración de Pedro Sánchez o de los ministros mencionando la amnistía para Puigdemont y los condenados del ‘procès’ de 2017. Y sí una suma de intervenciones a favor de un pacto por el diálogo y la convivencia con Cataluña siempre de los límites de la Constitución.
A favor de esa táctica de amenazar a Junts con ir a elecciones juega el dato que manejan en Ferraz de que si, en efecto, se produjera una vuelta a las urnas el próximo 14 de enero, el PSOE mejoraría sus resultados del 23-J porque podrá ‘vender’ que se ha plantado ante las exigencias de los independentistas.
El primer CIS pone en cabeza a Sánchez
Por si falta algo, el primer barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) tras las elecciones generales muestra que el comienzo de la legislatura y el camino hacia la investidura de Alberto Núñez Feijóo está beneficiando más al PSOE que al PP.
Solo dos meses después de los comicios que ganaron los populares, el CIS sitúa a los socialistas dos puntos por delante del PP. Pedro Sánchez lograría ahora el 33,5% de los votos, 1,8 puntos más que en las urnas, y Feijóo se quedaría en el 31,7%, 1,3 puntos menos.
