El informe de expertos sobre las pensiones desvela que en 2052 habrá 15 millones de jubilados en España. Vea el documento

La comisión de expertos a la que Fátima Báñez encargó un informe sobre la sostenibilidad del sistema de pensiones ya remitió a Empleo sus conclusiones. El Confidencial Digital ha tenido acceso al contenido íntegro del documento, que alerta de un fuerte crecimiento en el número de jubilados en los próximos 40 años.

Después de semanas de especulaciones y espera, los expertos consultados por el Gobierno para llevar a cabo una reforma de las pensiones acorde con las exigencias de Bruselas, y que también garantizara la pervivencia del sistema, presentó sus conclusiones el pasado viernes en Empleo.

El informe ha sido analizado ya, de forma preliminar, por los componentes de la Comisión del Pacto de Toledo, que públicamente han mostrado su apoyo o rechazo al documento, esbozando solo algunas de las partes del mismo.

Este diario ha tenido acceso a la integridad del informe, que defiende la necesidad de llevar a cabo una reforma en profundidad del sistema de pensiones, y propone una serie de nuevos factores para calcular la prestación a los jubilados en función de la situación económica por la que atraviese el país.

El sistema actual es insostenible

Según los expertos que han elaborado el informe, el actual sistema de pensiones tiene “riesgos potenciales” que provocarían, a medio plazo, un desajuste en la tesorería, por el envejecimiento progresivo de la población.

Así, los autores del documento alertan de que en las próximas décadas llegarán a la edad de jubilación grupos de población muy numerosos, nacidos en el ‘baby-boom’, entre finales de los cincuenta y la primera mitad de los años setenta del siglo XX.

Ese fenómeno provoca que el peso de la población mayor de 65 años en la población total haya crecido en las últimas décadas hasta el 17% actual, estando previsto que alcance el 37% en 2052.

En esta última fecha, por tanto, se espera que uno de cada tres individuos tenga más de 65 años. En cifras absolutas, el número de pensiones que prevé la Seguridad Social pasaría de los 9 millones actuales a los 15 millones en 2052.

Las pensiones cambiarán cada año según la situación del país

 

Para recalcular las pensiones en función de la situación económica del país, la comisión de expertos propone una serie de factores a tener en cuenta.

--Las pensiones en función del IPC. Tal y como se adelantó en estas páginas, el Gobierno informó, en un informe a la Comisión del Pacto de Toledo, de su intención de que la subida o bajada de las pensiones tuviera una relación proporcional con el IPC. Los expertos requeridos por Empleo también valoran de forma positiva esta posibilidad.

Los autores del documento explican que, para hacer sostenible el sistema, modular la revalorización de las pensiones alrededor del IPC en función de la evolución de las variables que determinan el equilibrio presupuestario del sistema.

En ese cálculo también tendrá que ver, junto al IPC, el llamado ‘factor de sostenibilidad’, que se obtiene de otros dos factores: el Factor de Equidad Intergeneracional de las nuevas pensiones de jubilación (FEI), y el Factor de Revalorización Anual de todas las pensiones (FRA).

--Factor de Equidad Intergeneracional. Este baremo tiene en cuenta el aumento progresivo de la esperanza de vida de los jubilados conforme pasan los años. Para obtener este valor de equidad, se dividiría la esperanza de vida de los que han entrado en el sistema con una edad determinada en un momento anterior, entre la esperanza de vida de los nuevos jubilados que entran con la misma edad pero en un momento posterior.

De esta forma, se obtiene, a largo plazo el equilibrio presupuestario del sistema de pensiones públicas, para que todos los jubilados reciban la misma pensión de forma proporcional. No obstante, los expertos reconocen que supondrá “una pensión inicial que irá disminuyendo respecto a su base reguladora”.

--Factor de Revalorización Anual. Se calculará en función del crecimiento de los ingresos, del número de pensiones, del efecto sustitución (derivado de que los pensionistas que entran anualmente en el sistema lo hacen con pensiones distintas de los que salen), así como de la diferencia entre ingresos y gastos del sistema de pensiones.

En este sentido, el citado factor hará que las pensiones suban o bajen en función de los cambios en las tasas de dependencia, de paro, de la inmigración, del número de cotizantes, los salarios y las cotizaciones.

Los expertos aseguran que la aplicación de estos factores para el cálculo de las pensiones, así como los cambios en los índices de cotización, como la necesidad de 25 años para percibir pensión frente a los 15 anuales, podrán aplicarse de forma progresiva en un periodo de cinco años comprendido entre 2014 y 2019.

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