Cepillo alisador: las claves del aparato perfecto para domar tu melena

Cuidar el cabello y conseguir tenerlo controlado son dos cosas bastante complicadas. Una melena fuerte y dura puede hacer que hasta el peinado más tonto sea toda una odisea frente al espejo. No es sencillo, sobre todo si hay de por medio rizos resistentes y rebeldes. Las que han tenido que lidiar con eso saben más que de sobra cómo puede ser intentar peinarse por las mañanas.

Pero hay productos de peluquería pensados para hacer las cosas más fáciles. Sin ir más lejos, tenemos que hablar del cepillo alisador. Un complemento, un accesorio, un producto que ha nacido para que alisar hasta las melenas más rebeldes sea un paseo. Descubre todo sobre el cepillo alisador de la mano de Elsa Suárez, de Micepilloalisador.com, web de referencia en cepillos alisadores y donde podrás encontrar más información y las últimas ofertas.

Cepillo alisador: qué es

¿Te imaginas tener algo que combine las bondades de un cepillo de pelo con las de una plancha alisadora? Pues eso es justo lo que ofrece el cepillo alisador. Esta herramienta usada por peluqueros y peluqueras profesionales ahora puede formar parte de tus productos habituales para arreglarte a diario. Un dispositivo que se maneja como un cepillo normal, que se cuela hasta en las melenas más densas y pobladas para alisar todo lo que se interponga en su camino.

Desenreda, peina y alisa el cabello. ¿Y cómo lo consigue? A través de la emisión de iones. Algo muy importante porque, a la vez que eleva su temperatura, con este sistema evita que el pelo se cargue de electricidad estática y se encrespe. Ese es uno de los problemas más habituales en productos de peluquería por el estilo, aunque ya se ha superado.

En cuanto a su funcionamiento, debe conectarse a la corriente para que comiencen a actuar las resistencias de su interior. Con eso, emite calor a través de su base y sus cerdas de forma que, al pasar por el cabello, lo calienta a la vez que lo alisa. Agiliza considerablemente todo lo relacionado con el peinado.En definitiva, te lo va a poner fácil siempre.

Cómo utilizar el cepillo alisador

En primer lugar, debes asegurarte de que el cabello está totalmente limpio y seco. Hay quienes recomiendan que esté desenredado, pero la verdad es que no es necesario. El propio cepillo alisador eléctrico se encarga de desenredar a la vez que actúa aplicando su calor. De hecho, gracias a este mismo hace que quitar enredos de la melena sea más sencillo. Sí, es otra ventaja que ofrece. Por si fueran pocas.

Después de eso, se debe separar el pelo en mechones, como si se fuera a usar una plancha tradicional. Siempre se debe empezar a utilizar el cepillo en la zona más cercana a la nuca, y "de dentro hacia fuera". Es decir, colocando el cepillo lo más cerca posible de la cabeza para coger el pelo (evitando el contacto con esta por si acaso), y peinando hacia el final de la melena, hacia el exterior.

Antes de empezar a aplicar el cepillo, hay que controlar su temperatura. Todos traen un sistema de regulación para que elijas la más adecuada para tu cabello. Lo mejor que puedes hacer, sobre todo las primeras veces, es empezar con algo bajo e ir elevando la cifra en el caso de que veas que no surte efecto. Eso sí, hay que andar con cuidado. Temperaturas muy altas pueden deteriorar el cabello considerablemente.

Con esto, y teniendo claro que siempre hay que ir desde la raíz a las puntas mechón a mechón, es más que suficiente. Recuerda también que no debes dejar una misma zona de pelo en contacto con el cepillo durante más de 5 segundos para evitar quemaduras. El resto es coger práctica y disfrutar de sus bondades.

Cómo elegir el mejor cepillo eléctrico alisador para ti

Para elegir el cepillo alisador adecuado, lo primero que debes tener en cuenta es la temperatura. Si tu cabello es fino, debe tener unos márgenes entre 170 y 190 grados; si es de grosor normal, entre 190 y 210 grados; y, si es grueso, entre 210 y 230 grados. Por otro lado, debes tener en cuenta la longitud del cable. No importa cómo sea el sitio donde te peinas, siempre es mejor que haya bastante longitud para evitar demasiadas limitaciones.

Además de eso, hay que tener en cuenta factores como la velocidad de calentamiento y los sistemas de seguridad. Los cepillos suelen incorporar un sistema de apagado automático con bloqueo para evitar seguir calentando cuando no se están usando, algo que da protección y evita quemaduras o problemas peores. En cuanto a velocidades, los modelos actuales suelen tardar unos 45 segundos en calentarse. 

Ten en cuenta eso a la hora de escoger y piensa también en posibles accesorios. Así es como podrás dar con el mejor cepillo alisador.